Una democracia sólida se construye con equilibrios, con diversidad de voces y con respeto a la legalidad. En momentos clave de nuestra historia, México ha demostrado que la pluralidad es su fortaleza y que el diálogo enriquece la vida pública.
Hoy, una parte importante de quienes toman decisiones en este país están ante un gran dilema: ocupar el Poder para obtener más poder sin escuchar al potro, sin respetar al otro, o fortalecer nuestra democracia a través de instituciones independientes, normas claras, libertades garantizadas y contrapesos que eviten los excesos del poder. Durante décadas, México intentó construir instituciones autónomas, medios libres y una ciudadanía participativa. Todo ello para proteger tu libertad y tu dignidad.
En Acción Nacional sabemos que los mexicanos quieren soluciones, seguridad, justicia y respeto a sus libertades. Por eso creemos en un modelo de país donde el poder tenga límites, donde la ley sea pareja para todos y donde la diferencia de opiniones se valore, no se persiga.
La democracia se defiende todos los días, exigiendo rendición de cuentas, denunciando abusos, protegiendo a quienes piensan distinto. Porque una sociedad libre no es aquella donde todos están de acuerdo, sino donde todas las voces pueden expresarse sin miedo.
Sin duda, México necesita reforzar su marco legal, pero debe hacerse con respeto, con apertura al diálogo y con visión de futuro. Debemos avanzar hacia un país más justo, más libre, más humano. Los mexicanos merecen un país donde todos tengan un lugar digno desde el cual participar.
Fortalecer a los contrapesos debe ser la labor de todos los días, para que la ciudadanía confíe, para que haya una nación sana, equilibrada, donde se escuche la crítica y donde se ejerzan plenamente los derechos.
México merece instituciones fuertes, ciudadanos libres y gobiernos eficaces. Este es el momento de reafirmar lo que nos une: el deseo de un país donde cada persona pueda vivir con seguridad, con respeto y con oportunidades reales.
La historia nos exige valorar y defender lo que hemos construido, sumar voluntades para fortalecer los pesos y contrapesos que protegen nuestra convivencia democrática. Porque solo así podremos asegurar un futuro donde los derechos no estén sujetos al poder, sino garantizados por la ley.
En el PAN lo hemos dicho claramente: vamos a seguir defendiendo tu libertad, tu voz y tu dignidad. Ese es nuestro deber y nuestra convicción.
El pilón: Ayer se celebró el Día Mundial del Árbol, por ello, acudí con el presidente nacional del PAN, Jorge Romero Herrera, dirigentes, legisladores y ciudadanos a limpiar la cañada de “El Pirú” en Álvaro Obregón.
El olor era terrible, había una concentración descontrolada de basura, y ello me obliga a hacer una reflexión en esta columna: los gobiernos deberían invertir dinero en lo importante. La presa San Francisco en la CDMX es un peligro permanente para la vida y la salud de los ciudadanos que viven ahí.
Siendo su voz y en este caso, su pluma, me uno a su exigencia para que, por el bien de todos, esto se atienda inmediatamente.
Diputada federal. @kenialopezr