Mientras Netflix ofrece una serie de estrenos lamentables y torpes, nada más de relleno, muchos se preguntan, ¿debo perder el tiempo con cosas como La hija del lobo, un thriller canadiense rutinario, a pesar de la guapa Gina Carano, muchos lobos y el insólito (que todavía viva) Richard Dreyfuss?
¿O en la infinita torpeza de Mudo, un thriller neonoir cyberpunk británico futurista, especie de Blade Runner de cuarta?
¿O tal vez viendo como David Cronenberg se vuelve loco con Crímenes del futuro, un coctel adulterado de terror fantástico, ciencia ficción y oscuridad latente muy sobrevalorada para su anterior filmografía?
Y así, mientras esperan para noviembre la nueva versión de Oliver Stone, al asesinato de Kennedy, JFK caso revisitado, son contados los aciertos de la plataforma donde impera la ley de la mediocridad en la selección de títulos “de estreno”.
En esa ley de la selva cinematográfica, hay la posibilidad de ver otro cine que, ni de chiste, se asoma en otras plataformas.
De España, Alex de la Iglesia, que hace años en una de las mentiras más célebres del negocio trató de revivir a Santo, el Enmascarado de Plata, aliándose con su hijo, El Santito, reivindica ahora a los venecianos con un terror combativo hacia los turistas, que mucho tiene que ver con el giallo italiano.
Con sus altas y sus bajas, De la Iglesia trata con un slasher de humor negro bastante aceptable. Y, por si no quedara espacio para la combatividad punk, se revive un concierto de 2016 en directo de La Polla entre Madrid y Zaragoza, con más de 30 directos de afilado punk.
Directo de Finlandia llega Pahanhautoja, que han rebautizado como Hatching, que combina la gimnasia con el terror y un extraño huevo que promete varadas sorpresas cuando se destroza el cascarón. Dirige esta curiosidad Hanna Bergholm.
Y, en un ambiente puro de hierba buena, La leyenda del 420 resume, desde un punto de vista cómico, la progresión que ha tenido el cannabis. Todo mundo se involucra ante el imparable humo de la verde, no legislado todavía cabalmente.
México, que produce una gran cantidad de películas que sólo se asoman en algunos festivales para que luego les apliquen el enlatado permanente a la mayoría de ellas, rescata para el cinéfilo local una serie de curiosos filmes que aparecen casi de la nada. Uno de ellos es Tenemos la carne, de Emiliano Rocha Minter, que muestra una combinación de terror, gore y erotismo, con dos hermanos que caminan sin rumbo fijo en una ciudad en ruinas. Tuvo un Ariel (2016) a la Mejor revelación femenina (María Evoli) y luego voló a Sitges para participar en la Sección Oficial de Largometrajes.
Después de 12 años de haber sido filmado el documental Machete maidens unleashed!, de Mark Hartley, regresa en DVD el Cine de Explotation, con una selección única de cierta sangre, tripas y situaciones extremas.
Dictan cátedra de este tipo de cine: Roger Corman, Joe Dante, Dick Miller, Pam Grier y Paul Koslo, entre muchos irreverentes del cine. Sorpresas, para quienes nunca la vieron, garantizadas por completo.
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