No podría saber las verdaderas razones de Movimiento Ciudadano para ir solo a los comicios. Ellos dicen que se trata de presentar un partido nuevo, fresco, no contaminado por juntarse con partidos manchados por su pasado de abusos y corrupción, ni con el actual partido gobernante, que va por ese mismo camino. Además, su propuesta no es el retorno a la noche oscura del neoliberalismo, sino que proponen una agenda socialdemócrata (corriente con la que me identifico desde siempre), y en esa medida se ofrece una “tercera vía” entre el pasado neoliberal y el pasado aún más remoto del nacionalismo-revolucionario (con su dosis de socialismo del siglo XXI, como lo refleja la admiración de AMLO por Fidel Castro, y su apoyo y amistad con las dictaduras bolivarianas).
Presentarse como partido nuevo y fresco ha sido una gran ventaja para Morena, pese a estar formado por añejos priistas, panistas y perredistas que participaron del pasado que hoy condenan. MC busca beneficiarse también presentando una nueva imagen, generando confianza y credibilidad, y en esa medida convertirse en gobierno (quién sabe cuándo). No creo que Dante crea su afirmación de que ya en 2024 podrán ganar solos las elecciones y ocupar el gobierno. Eso sólo podría suceder en un escenario muy poco probable: que el candidato de la coalición PRI-PAN-PRD, en caso de lograrse, sea tan malo y poco convincente que el candidato de MC capte el grueso del voto útil. Ese escenario es poco probable, si bien dependería del candidato de oposición respecto del de MC, por la simple suma del voto de aquellos partidos que supera los de MC.
Hay quien piensa, no sin fundamento, que si por ejemplo Marcelo Ebrard, de no ser destapado por AMLO, abandona Morena y se incorpora como candidato de MC, podrá ser más competitivo que cualquiera que elija la coalición opositora. Quién sabe. En tal caso, o bien los otros partidos deciden sumarse con MC y Marcelo, o éste logra congregar suficiente votación (útil o no) para derrotar a Morena y también a la oposición. No es tampoco un escenario probable, pero hay quien no lo descarta del todo. Creo más bien que Dante está haciendo tiempo para hacer un buen cálculo según las circunstancias ya cerca del proceso, y entonces tomar una decisión (por lo cual tomará la decisión tras saber quién tendrá la candidatura en Morena, y ver si se contará con Marcelo o no). Y esa espera puede elevar el valor de su eventual participación en la coalición opositora, si es el caso. Pero incluso para ello, tendría que mostrar que reúne suficiente votación para ser fulcro de la balanza, y en la elección del domingo no le fue tan bien. Su votación promedio no creció (y haber designado como candidato en Quintana Roo a alguien políticamente atractivo, le ayudó a que no le fuera peor).
Es verdad que no sabemos cuántos votantes de MC darían su voto a Sí por México (hacen falta encuestas al respecto). Algunos sondeos sugieren que sería la gran mayoría, en cuyo caso el saldo para los aliados sería positivo. En cambio, de ir solo y no ganar la Presidencia, pero captar suficiente voto como para permitir el triunfo de Morena, MC podría sufrir un elevado costo político entre el electorado que le es natural; los disidentes y opositores a Morena. De poco servirá a este partido un programa atractivo si el grueso de opositores y disidentes lo ve como un “caballo de Troya” de Morena, aunque no fuera cierto.
Analista. @JACrespo1