La salida del piloto tapatío de las filas de Red Bull, apenas en diciembre pasado, prendió todas las alarmas en los aficionados a la Fórmula 1, sobre todo en aquellos que precisamente llegaron a la máxima categoría de la mano de Sergio Pérez. He hablado con infinidad de fanáticos que afirman una y otra vez que la próxima temporada no será lo mismo para ellos sin Checo, y que de hecho abandonarán el serial sin tener ahora una justificación para desvelarse cada fin de semana.
Cadillac, marca automotriz americana, que apenas hace unos meses se confirmó como el undécimo equipo de la Fórmula 1, algo inusitado y a lo que los equipos instalados desde hace ya varias décadas no habían aceptado a abrirse.
Con este anuncio, los aficionados se decantaron rápidamente y de manera natural para que Cadillac sea la nueva escudería en la que Pérez regrese a la Fórmula 1, especialmente después de que la escudería americana manifestara que necesita en sus filas a un piloto de experiencia. Y es que es prácticamente una regla el que cada vez que una escudería nueva debuta en Fórmula 1, necesita con urgencia un volante que la construya y ayude a hacerla competitiva con su retroalimentación técnica. Ejemplos de esto hay varios, tal como en su momento ocurrió con Mercedes, que sacó del retiro a Michael Schumacher, o como lo hizo el mismo Red Bull fichando a David Coulthard. Sin embargo, como sucedió con Toyota, la apuesta no siempre resulta exitosa.
Para que Checo regresara a la Fórmula 1 como piloto de Cadillac, debe existir un compromiso tal de la marca de volverse una escudería ganadora (con todos los recursos financieros, técnicos y humanos), además de un jugoso contrato en términos económicos que lo hagan ponerse nuevamente al volante de un F1. Pero por otro lado, Sergio Pérez, que sumaría al equipo a su larga lista de patrocinadores, tendría la presión de dar resultados pronto, porque los aficionados después de verlo sumar podios y victorias en Red Bull, buscan, desean y exigen que el mexicano regrese en ese plano al Gran Circo.
Desafortunadamente, construir un equipo ganador en el estanque de pirañas que es la máxima categoría toma mucho tiempo, para muestra un botón, el de Schumacher en Mercedes, en donde sólo pudo tener un podio,
Los aficionados tenemos que aceptar que si Pérez regresa a la Fórmula 1 en un equipo como Cadillac será para verlo, al menos los dos primeros años, en la media tabla. El padre de Checo ya ha comentado que no ve a su hijo regresando a la Fórmula 1 sólo para subirse a un coche, que tendría que ser en un equipo ganador y Cadillac todavía está a varios años de serlo y consolidarse como una fuerza combativa en la Fórmula 1.
Finalmente, la decisión estará del lado del piloto mexicano.
@jorgedialogante