La imagen rompe cualquier molde: un sacerdote que administra dos parroquias en su natal Portugal, viste con camisa de alzacuellos, pero además usa audífonos y es experto en manejar una consola que lo ha llevado a los festivales más reconocidos, frente a miles de jóvenes que bailan al ritmo de la música electrónica. Él es el padre Guilherme Guimarães Peixoto, conocido como el Cura DJ, y lleva el Evangelio a lugares donde pocos imaginarían encontrarlo.
Su propuesta es audaz. No es una performance, no es marketing: él lo llama “Iglesia en salida”, como la pidió una y otra vez el Papa Francisco. Y lo dice con claridad: “La fe no es para esconderse ni para dejarla de lado. Al contrario: vivamos la fe con alegría”, como compartió en una entrevista reciente con la publicación Desde la fe.
Este sacerdote no se mimetiza con el mundo: es él mismo dondequiera que va. “Soy sacerdote en la parroquia y soy el mismo sacerdote en un entorno más abierto o más privado. No cambia nada”. Su misión, asegura, es la de Jesús: ir a donde están los demás, sin esperar que vengan primero al templo. Incluso si eso implica estar en medio de un club o un festival.
Lo interesante es su comprensión del lenguaje. En el templo predica con el micrófono en mano y con el Misal bajo el brazo, pero fuera de él también evangeliza desde el lenguaje que los jóvenes entienden: la música. “Si estoy en un club y quiero hablar de mi fe, ¿cuál es el lenguaje correcto? El lenguaje de allí es la música electrónica. Y es ese el lenguaje que uso”.
Claro, su propuesta no ha estado exenta de críticas. Pero él ha aprendido a no ceder al juicio fácil: “Primero duele, luego fortalece”. Y agrega, con convicción, que no lo hace para agradar a nadie. “Lo hago por Cristo”.
La figura del Cura DJ nos habla de una Iglesia viva, audaz, libre. De una Iglesia que sale a las calles, en busca de los espacios donde los jóvenes se sienten más cómodos. Nos recuerda las palabras de San Juan Pablo II: “No tengan miedo. Abran de par en par las puertas a Cristo”, y también las del beato Carlo Acutis: “Si Dios nos hizo originales, no seamos fotocopias”.
La música electrónica no es el centro. Lo es el testimonio. Y en tiempos en que muchos jóvenes se sienten lejos de Dios o heridos por la religión, la valentía de un sacerdote que se atreve a estar donde ellos están, sin perder su identidad, es una semilla poderosa.
Este sábado 5 de julio, en el Seminario Menor, Casa Huipulco, de la Ciudad de México, el Cura DJ participará en vivo en el Jubileo de los Jóvenes por la Esperanza y la Paz, un evento organizado por la Iglesia de la ciudad para celebrar la fe en clave juvenil. Música, oración, arte, Eucaristía y la alegría de la fe se entrelazarán en una jornada que quiere decirle a cada joven: Dios está contigo, aun si crees estar lejos.
La Iglesia no cambia en absoluto su mensaje, pero sí está llamada a cambiar el tono, el ritmo y el medio por el que lo comunica. Y el Cura DJ, con cada beat, apuesta por la creatividad.
Director de Comunicación de la Arquidiócesis Primada de México. Contacto: @jlabastida