Gustavo Sosa Núñez

La temperatura del planeta sigue incrementándose. Superando el récord de 2023, el 2024 fue el año más caliente en los registros de la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA, por sus siglas en inglés) de los Estados Unidos y el Servicio de Cambio Climático Copérnico de la Unión Europea. De hecho, 2024 fue el primer año que tuvo un incremento en la temperatura promedio de 1.5°C por encima de niveles preindustriales, que es el límite expuesto en el Acuerdo de París.

Esta alarmante tendencia recibe cada vez menos atención. Las razones pueden ser varias, dependiendo del ojo del observador. La renuencia a modificar estilos de vida, tanto por comodidad como por las implicaciones económicas, sociales y culturales de hacerlo, junto con la importancia de atender necesidades inmediatas, parecen ser las principales, al ralentizar el seguimiento que se le da a un tema que es de largo plazo; aunque las evidencias de su impacto están ya a la vista de todos.

El ejemplo contundente de dicha tendencia se observa en la tónica que está caracterizando a las Conferencias de las Partes (COP) de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (CMNUCC). En la COP28 de 2023 se acordó el "principio del fin" de la era de los combustibles fósiles, siendo Dubái paradójicamente la sede, capital de un país cuyos intereses fósiles son importantes; y para la COP29 de 2024, en Baku, hubo un fuerte cabildeo a favor de combustibles fósiles que incluso permitió hacer negocios entre compañías estatales de petróleo y gas. Habrá que ver cómo se desarrolla la COP30 en Belén, Brasil.

Gustavo Sosa Núñez, investigador del instituto mora
Gustavo Sosa Núñez, investigador del instituto mora

Esto se vincula con otra tendencia. El negacionismo climático está surgiendo y ganando adeptos en la esfera política, incidiendo en agendas gubernamentales que generalmente se asocian con la extrema derecha. El caso más relevante será la próxima administración de Donald Trump en Estados Unidos, quien es conocido por sus posturas contrarias al combate al cambio climático, desde su primer período como presidente, y que ha anunciado la desregulación de índole ambiental en aras de promover la reubicación de industrias en su país.

La nueva llegada de Trump al poder puede tener un efecto cascada en América del Norte. Trudeau renunció, y quien es el favorito para remplazarlo en Canadá, el líder conservador Pierre Poilievre, ha expuesto la necesidad de construir refinerías, plantas de gas natural licuado, tuberías, e infraestructura para reducir la dependencia de su país con respecto a Estados Unidos. Este posicionamiento recuerda que la inmediatez, el interés nacional, y la geopolítica preceden en importancia al combate al cambio climático. De ganar, ya serían dos gobiernos con posturas anticlimáticas en el contexto del T-MEC, lo que puede incidir en futuras posiciones de México en la materia.

Otras latitudes con gobiernos de extrema derecha también comparten posiciones anticlimáticas. La Argentina de Milei abandonando las discusiones de la COP29 representa el caso en América Latina. En la Unión Europea, Hungría e Italia ejemplifican la tendencia, misma que está permeando en las instituciones europeas en Bruselas. Asimismo, los partidos políticos que comparten estas opiniones están teniendo réditos electorales, lo que sugiere que posturas anticlimáticas están creciendo entre la población europea. Vox en España, AfD en Alemania, Reform en Reino Unido, PVV en Países Bajos, FPÖ en Austria, y la Agrupación Nacional en Francia son solo algunos casos que confirman la tendencia. De hecho, varios de ellos forman gobiernos de coalición a niveles nacional, regional y local, por lo que ocupan espacios de poder para incidir en el rumbo a seguir.

Ante este panorama, es posible proyectar una tendencia más, correspondiente al establecimiento de mecanismos de cooperación entre gobiernos de extrema derecha y negacionistas del cambio climático; buscando fungir como dique de contención ante políticas y acciones climáticas que no empatan con sus agendas públicas.

Por lo que representa Estados Unidos a nivel mundial, es probable que el inicio de la segunda presidencia de Trump exacerbe las distintas tendencias expuestas en este texto; a la vez de ocasionar otras más, tanto a favor como en contra. La politización del combate al cambio climático se profundiza y, con ello, la integridad del planeta.

Con información de:

Copernicus Climate Change Service. (enero 10, 2025). Global Climate Highlights 2024. The 2024 Annual Climate Summary. Recuperado de:

Global News. (enero 10, 2025). Poilievre says Canada selling oil and gas at "massive price discount" to US. You Tube. Recuperado de:

Lory, G. (noviembre 18, 2024). Gran presencia en la COP29 de grupos de presión de combustibles fósiles de toda la UE. EuroNews. Recuperado de:

NOAA. (enero 10, 2025). 2024 was nation’s warmest year on record. Recuperado de:

Gustavo Sosa Núñez es Profesor-Investigador en el Instituto Mora. Doctor en Ciencia Política y Maestro en Relaciones Internacionales por la Universidad de East Anglia. Realizó una estancia posdoctoral en la FCPyS de la UNAM. Miembro del Sistema Nacional de Investigadoras e Investigadores, nivel II. Sus intereses de investigación refieren al enfoque ambiental de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, y la política ambiental y climática en México, a escala regional e internacional.

@gssosan

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