Ahí estaba ese hombre, metiendo a su boca la cuchara llena de helado. La chupaba, se lo comía con delicadeza, adoración y placer. No había duda del regocijo que estaba experimentando, era todo un hedonista. Incluso llegué a pensar: “cómo me gustaría ser esa cucharada llena de helado en este momento”.

Al verlo desde el otro lado del restaurante, la experiencia me llevó a reflexionar. Si bien ese hombre desbordaba de placer por su delicioso postre, me pregunté: ¿Hará eso mismo con el cuerpo de su esposa? ¿Por qué no deleitarse con una mujer, que es un ser divino, mágico, al igual que como se hace con un helado? El cuerpo puede ser el postre más exquisito que se puede poseer. Pero, ¿realmente lo disfrutamos con la devoción que ejercemos sobre una bola de helado? Tristemente no.

Muchas mujeres hemos estado con hombres que cuidan más a… ¡Su aaauto! Lo lavan con delicadeza, como si fuera su bebé. En cambio, a nosotras nos tratan con indiferencia, lejos de la sutileza con la que tratan a su coche. Y nosotras no nos quedamos atrás, a veces también, le ponemos más atención a la bolsa o los zapatos que a nuestra pareja. En las artes de la conexión profunda y el erotismo, el auto, la bolsa y, por supuesto… el helado, van ganando la batalla. ¡Es una locura! Siempre he pensado que si vas a hacer el amor, haz el amor; si no, ¿para qué estás ahí?

Creemos que el erotismo tiene que ver únicamente con sexo, pero no es así. Erotismo es la capacidad que tenemos los seres humanos de sentir, de provocar deseo y placer. ¿Por qué no exportar esta capacidad a todo lo que experimentamos y de esta forma, le hacemos el amor a la vida?

A veces nos sentimos apáticos o deprimidos, pero justamente en estos momentos, es cuando hay que ponerle mucho más amor y erotismo al asunto; y si no nos sale, hay que actuarlo, porque al hacerlo, provocamos que la actuación se convierta poco a poco en nuestra nueva realidad.

¿Qué pasaría si a ese trabajo que odias le inyectas un poco de más amor? Te aseguro que, se va a transformar en uno que sí te guste, y si no, tendrás la fuerza para renunciar y tu energía estará tan alta que manifestarás otro mejor.

Si te sientes desconectado de tu pareja, intenta ponerle erotismo e intención a tu relación. Y si ya hiciste de todo y las cosas no funcionan, ¿qué sucedería si te divorcias con amor, haciendo lo correcto y agradeciendo por todo lo bueno? ¿Y si le das prioridad al cuidado del corazón de tus hijos en este proceso?

Si tienes que pagar los gastos y eso te provoca ansiedad, prueba pagarlo con amor e imagina cómo se te devuelve multiplicado.

El chiste es crear espacios eróticos en las cosas mundanas: al bañarte, elige tu música favorita y disfruta del contacto de tus manos con tu piel y la exquisitez del jabón. Al comer con tu familia, deja tu celular y disfruta de ese momento único.

Ponle amor y erotismo a todo, así elevarás tus finanzas, tu estado de ánimo, te acercarás a personas más valiosas y situaciones que te ayudarán a crecer. Hasta las relaciones más complicadas empezarán a mejorar porque contagiarás a todos con tu energía.

Hacer todo con amor, es el INGRIDiente secreto para disfrutar del erotismo en tu vida, tanto en la piel de tu pareja como en una cuchara llena de helado.

Escríbeme en mis redes sociales y dime de qué tema te gustaría que platicáramos. Gracias por acompañarme una vez más.

IG: @Ingridcoronadomx

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