Llevo varios años oyendo decir que hay escasez de talento para realizar distintas actividades productivas. La falta de fuerza laboral calificada abarca distintas industrias y países, pues no solamente atañe a las tareas del sector de ciencia o tecnología y mucho menos se trata de un problema exclusivo de México o países similares. La demanda de talento especializado crece rápidamente, pero la oferta no.
Sin embargo, ¿es necesario u oportuno esperar a que las universidades generen esas camadas de profesionales con nuevas habilidades necesarias en el mundo laboral? ¿Qué pasa con los actuales empleados que demandan reaprender o reconocer nuevas habilidades? ¿Las empresas están conscientes de las necesidades de actualización de sus trabajadores? ¿Cómo pueden las empresas preparar a su fuerza laboral para enfrentar los continuos retos que el mundo presenta?
Esas son algunas de las preguntas que en 2020, a raíz de la pandemia, se hacía la proveedora de soluciones tecnológicas de gestión de talento Cornerstone onDemand, quien este jueves publicó los resultados de la edición 2022 de su estudio de investigación global que muestra las tendencias en el desarrollo de habilidades. La encuesta evaluó las opiniones de mil 800 empleados y más de 800 líderes empresariales en América del Norte, Europa, Medio Oriente, África y Asia-Pacífico y, si aún no lo sabes, Cornerstone ofrece soluciones de recursos humanos para unir tecnología, datos y contenido mediante un sistema experiencial impulsado por inteligencia artificial.
El informe Thriving in the Global Skills Shortage: Your Path Through the Wilderness , realizado por Cornerstone People Research Lab, muestra que se amplió la brecha entre lo que piensan las empresas que están haciendo bien para desarrollar las habilidades de sus empleados, y lo que ellos creen que necesitan para lograrlo. Es decir, las empresas creer que están apoyando, pero los empleados consideran que no tanto.
La brecha más grande se observa entre las empresas u organizaciones de bajo o medio desempeño, mientras que en las organizaciones de alto desempeño (HPO) la brecha es menor, pues hay más coincidencia entre empleados y empleadores de que la organización se preocupa por desarrollar nuevas habilidades en su fuerza laboral.
En ese sentido, el estudio pone énfasis en seguir el ejemplo de estas HPO y poner en práctica estrategias como predecir las habilidades que necesitará la empresa en el futuro, fomentar la cultura del aprendizaje y capacitar al personal, crear estrategias y contenido de aprendizaje más relevante, moderno y personalizado, adoptar una mentalidad que priorice el desarrollo de talento interno y, lo más valioso para este espacio: integrar tecnologías inteligentes para el desarrollo de habilidades dentro de otras herramientas que las empresas estén usando.
Para nadie es una novedad decir que la pandemia aceleró los problemas o la capacidad de las empresas para adaptarse a la transformación digital. Sin embargo, pocas veces se sabe estos vertiginosos cambios influyeron en el futuro de la fuerza laboral global; por lo tanto, estudios como este nos ayudan a tener una guía y ver hacia el futuro. Cool.
RADIOCOMUNICACIÓN, ACTUALIZAMOS
Otra de las habilidades blandas o soft skills que sólo se aprenden en la práctica profesional es la comunicación. Decir mentiras o medias verdades con el fin de hacer creer algo como totalmente cierto, es algo que difícilmente aprendemos en las universidades. Por eso, retomo el tema de la licitación de los equipos de radiocomunicación de la sedena, pues sigue la polémica.
Nuevamente se pospuso para el próximo 9 de mayo el fallo de la licitación LA-007000999-E127-2022 de la Sedena. Lo que no se pospuso fueron los argumentos en contra de lo que, insisten Mis Amigos Chismosos (MACH), es una contratación dirigida.
Como sabes, la semana pasada publiqué la réplica que la empresa Intercomunicaciones Móviles Satelitales (Inmosat) me envió para corregir algunos comentarios sobre dicha licitación. Al respecto, lancé una provocación a MACH y me envían esta contrarréplica a Inmosat.
Me informan que, en septiembre de 2021, la Guardia Nacional emitió un documento con la justificación para entregar una adjudicación directa para el contrato de servicios de comunicación de terminales satelitales a Inmosat. En ese documento se cita el acta de la trigésima cuarta sesión del Comité Especializado en Materia de Comunicación Satelital para la Seguridad Nacional, celebrada el 16 de agosto de 2017, en la cual se establece que las dos únicas compañías autorizadas para comercializar y vender los productos satelitales eran Bittium Wireless, a través de Inmosat, y Hughes Network, a través de su socia Spacenet.
En el mismo documento de la Guardia Nacional se cita otro oficio del 3 de septiembre de 2021, en el cual Spacenet informa que perdió la exclusividad de Hughes, pues esta empresa dejó de vender esos servicios en México. Por lo tanto, Inmosat tendría la “exclusividad como única empresa autorizada para proveer equipos y servicios relacionados a las terminales móviles” satelitales.
En concreto, desde 2021 Inmosat es el único que tiene posibilidad de vender terminales satelitales con conexión PTT para uso en el satélite Morelos 3 de MexSat porque Hughes y su socia Spacenet ya no dan ese servicio en el país.
Eso no lo digo yo, lo dice un documento público del cual tengo una copia, pero la moraleja que obtengo de este argüende es que todo mundo se asume como el que tiene la mejor tecnología y que las demás son obsoletas. Por eso, no estaría mal organizar debates públicos de cara a la industria, las autoridades y los ciudadanos que necesitan comunicaciones protegidas para los cuerpos de seguridad pública. Estaría de lujo que EL UNIVERSAL funja como plataforma o huésped de tal debate, ya que todo mundo se dice dispuesto.
Twitter: @hugonzalez0