El conflicto que se vive en el territorio nacional, respecto a la actuación de grupos delincuenciales, ha generado innegablemente un impacto contundente en la estructura social que se conforma a lo largo y ancho de nuestro país. Estas organizaciones han sentado sus bases en diversos territorios y han logrado penetrar las estructuras sociales; una base social cooptada a través de estímulos económicos que, de diferentes formas, los delincuentes entregan a la población. Este arraigo en la estructura social complica aún más el combate que encabezan las autoridades responsables de la seguridad pública.
En todo el país se vive el flagelo de la inseguridad, pero hay estados de la república que, de una u otra forma, han logrado contener tan lamentable situación. No obstante su vecindad con localidades altamente violentas, San Luis Potosí, gracias a las acciones emprendidas por el actual gobernador Ricardo Gallardo Cardona, ha logrado frenar el avance delincuencial, blindando los límites con sus estados vecinos para impedir la penetración y desplazamiento de esos grupos a su entidad.
Gallardo ha tenido el tiempo para reforzar y fortalecer la estructura social de su entidad, y no solo lo hace a través de programas sociales, también ha puesto un sello a su administración al atender de forma decidida a los diversos grupos vulnerables como son: madres solteras, personas con discapacidad y adultos mayores; de igual forma, ha puesto un sello a su administración, pues busca el bienestar de las familias potosinas a través de una oportuna y adecuada implementación de programas en materia de salud pública.
Recientemente, anunció la creación de un nuevo programa que atenderá, en sus propias comunidades, a las mujeres y a los dependientes menores de estas, por lo que ya es reconocido como el gobernador de la salud.
Gallardo Cardona se anotó un éxito más cuando, en la semana que recién transcurrió, entregó al pueblo de San Luis Potosí el parque más emblemático de toda la región centro: el Tangamanga. La extensión territorial de este espacio y las características del mismo se vieron fortalecidas por las acciones gubernamentales en su rescate.
El Tangamanga, hoy, no sólo es el atractivo turístico más importante de la capital y de la zona conurbada, que incluye a Soledad de Graciano Sánchez, el Tangamanga, hoy, se consolidó como el espacio público más representativo para la convivencia de todos y cada uno de los grupos sociales que habitan este bello estado. Lo mismo para personas con capacidades diferentes, que para adultos mayores o niños y familias con sus animales de compañía, quienes ahora pueden disfrutar, incluso, de horarios nocturnos y del espacio conocido como el parque Cri-Cri, en honor al compositor mexicano Francisco Gabilondo Soler.
Pero ¿por qué es tan significativo que este espacio ya no sea exclusivo para aquellos que les gusta la práctica deportiva o para sectores de una clase social media y alta?
La respuesta es que Gallardo Cardona entregó a la sociedad potosina el espacio público más representativo, mismo que hoy ha sido tomado de forma evidente por miles de familias que han abarrotado esta zona, donde se integra con mayor consistencia la sociedad en su conjunto.
Lograr la inclusión y la armonización de todos los sectores sociales no es un reto fácil, pero una vez que se logra, se garantiza un espacio único y exclusivo de la sociedad en su conjunto y se blinda de aspectos negativos o peor aún, que estos sean arrebatados para prácticas delincuenciales.
Los potosinos aplauden el rescate de este magnífico espacio, consolidado ya como un símbolo de esta entidad. Mientras existan espacios públicos como este, la sociedad se fortalece en su convivencia y garantiza la inclusión, sin sesgos de índole político y económico.
“Potosí para los potosinos” es el eslogan del gobierno actual; sin embargo, el Tangamanga se consolida como un atractivo turístico que puede ser visitado por cualquier persona. Fortalecer los espacios públicos es fortalecer y blindar a la sociedad en su conjunto.