“Si algo me llega a pasar a mí o a mi familia, el responsable es El Chispa”, le dijo el activista Gabriel Hernández Tovar a la periodista Azucena Uresti un mes antes de que lo mataran.
Se refería a Mario Guitián Rosas, operador de Los Metros, una facción del Cártel del Golfo que opera en Reynosa, Tamaulipas.
De acuerdo con información de inteligencia, dicha facción es dirigida por César Morfín Morfín, El Primito, quien hace años estableció una alianza con el Cártel Jalisco Nueva Generación y en mayo pasado fue sancionado por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos por robo de combustible y tráfico de fentanilo. El Primito es señalado por Washington como líder del Cártel Jalisco en Tamaulipas.
Reportes de inteligencia indican que debajo de él se encuentra Carlos Humberto Acuña de los Santos, El Comandante Mono o El M36, y que más abajo se encuentra El Chispa, quien opera “físicamente” en Reynosa.
Mario Guitián Rosas controla una serie de empresas legalmente establecidas que sirven de fachada a las actividades del grupo criminal. El activista Hernández Tovar lo vinculó con despojos de predios y terrenos que más tarde fueron convertidos en almacenes donde se depositaron millones de litros de huachicol. Los reportes lo ubican a la cabeza de una serie de secuestros y extorsiones a empresarios.
Una línea de investigación lo vincula con el asesinato del delegado de la FGR Ernesto Cuitláhuac Vázquez Reyna, ocurrido poco después de que fuerzas federales realizaran el aseguramiento en la colonia La Escondida de dos millones de litros de combustible introducido al país de manera ilegal. El Chispa controlaba la delegación de la FGR en Reynosa: según reportes oficiales, Vázquez Reyna solía reunirse frecuentemente con él. Hay registros de que le reclamó al delegado por el operativo que se les cayó encima.
Al Chispa le dicen también El Señor de Reynosa. Posee decenas de negocios: funerarias, purificadoras, talleres mecánicos, empresas de seguridad privada, table dances, así como flotillas enteras de taxis. Según la información de inteligencia, está encargado de las “relaciones públicas” de El Primito y El M36.
El activista Gabriel Hernández Tovar había sido amenazado de muerte por un enviado suyo. Por orden de un juez federal, recibió protección del Mecanismo de Protección de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas. La protección le fue retirada de pronto sin explicación. Seis días más tarde encontraron su cuerpo en un canal de aguas negras.
En marzo de 2022 El Chispa apareció en una foto al lado del senador morenista José Narro Céspedes y el entonces candidato a la gubernatura de Tamaulipas, Américo Villarreal. Fue una foto tomada en un restaurante de Plaza Oasis, al sur de la Ciudad de México, que Narro Céspedes subió a sus redes y más tarde eliminó.

Fue el día en que dos marinos se reunieron con él en el restaurante Cambalache. Sus nombres: Óscar Manuel González Andrade y Victoriano Rodríguez Zurita. Se los habían enviado como escoltas por órdenes de la alcaldesa de Acapulco, Abelina López Rodríguez.
Fue la última vez que los vieron. No volvió a saberse de ellos.
Lo mismo ocurrió con otro de los personajes que aparecen en esa imagen: Teodoro Vázquez Barrera, apodado El Gerry. El Gerry estuvo en la misma mesa que Américo Villarreal y Narro Céspedes. En el expediente del caso se afirma que la colonia Insurgentes Cuicuilco fue el lugar de su extravío.
Américo, Narro y El Gerry no están solos. Detrás de Narro aparece nada más y nada menos que Mario Guitián Rosas, El Chispa. Y a su derecha, está un operador político de este personaje, el empresario, líder sindical y se dice que prestanombres de Guitián Rosas, Luis Ernesto Martínez Fuentes.
Durante la campaña de Américo Villarreal a la gubernatura, Narro Céspedes instaló en Reynosa una Casa de Enlace. El jefe de oficina fue Luis Ernesto Martínez Fuentes, pero le quitaron el puesto un mes después, cuando el escándalo de los marinos desaparecidos comenzó a escalar. El predio había sido proporcionado por El Chispa: sus operadores se encargaron de “atender” a Narro durante su estancia en Reynosa, en el tiempo en que fue enviado a operar la elección de Américo.
En la foto comprometedora tomada en Plaza Oasis, El Gerry y El Chispa aparecen, hombro con hombro, detrás de Américo y de Narro.
El Gerry fue identificado muy pronto. Al Chispa le tomó un poco más de tiempo ser reconocido como uno de los personajes que aparecen en la imagen (o acaso llevó un poco más de tiempo que los informes que reportan su presencia pudieran ser corroborados).
Según los reportes, Mario Guitián Rosas, operador de El Primito y del Comandante Mono, ligado anteriormente a panistas tamaulipecos, se acercó a Morena a través del hoy diputado y líder de la CATEM, Pedro Haces Barba, con quien aparece retratado en incontables actos oficiales. El operador del Primito llegó a estar presente en una visita a Tamaulipas de la entonces candidata Claudia Sheinbaum, según se aprecia en las fotos que aquí se comparten.



Villarreal y Narro deben aclarar qué hacían en su mesa dos figuras centrales del crimen organizado en Tamaulipas, durante la tarde siniestra en la que los dos marinos asignados como escoltas desaparecieron.
@hdemauleon