Llegó el final de la historia entre Tomás Boy y el Guadalajara, pero —una vez más— los directivos se van por la más fácil.
Siempre será más sencillo culpar al técnico, pero no podemos dejar de lado que esto se gana en la cancha y que muchas veces no basta con la calidad, sin entrega.
Lo de las Chivas es vergonzoso. Llevan varios torneos sin clasificar a la Liguilla y tal parece que este no será la excepción, porque aún con la llegada de Luis Fernando Tena, no se garantiza que el boleto se dé y mucho menos que este equipo pueda funcionar.
Por logros, siempre será más lógico apostar por Tena que por Boy , pero no se nos tiene que olvidar que ninguno es mago para revertir la situación de un día para otro.
Hay muchos jugadores que se tendrían que ir de este club y dejar que los jóvenes den la cara, porque se puede perdonar todo como aficionado, pero no que se mueran de nada los que aparecen en la cancha.
Luis Fernando Tena
, ¿en serio?, ¿esta es la gran apuesta del Rebaño para afrontar lo que viene? Queda claro que la culpa no la tienen los que han llegado, sino las personas de pantalón largo.
Está clarísimo que no se ve por dónde las cosas puedan mejorar y mucho menos se ve que pueda ser Luis Fernando el que venga a hacer algo distinto con estos personajes.
El sábado enfrentan al América en el Estadio Azteca y, aunque el rival no vive su mejor momento, se ve complicado que —en tan pocos días— las Chivas puedan mejorar, por lo menos en actitud.
