Kanye West había estado muy bien portado en los últimos meses, pero parece que ya despertó y ha empezado a dar de qué hablar este 2024 y en esta ocasión es noticia porque los herederos de la cantante Donna Summer lo han demandado.
Según el documento emitido desde los tribunales de California, se le acusa de incorporar fragmentos del éxito “I feel love”, de 1977, de Donna Summer, a su canción “Good (don´t die)”, de su reciente producción discográfica, Vulture 1, que comparte con Ty Dolla $ign.
De acuerdo con los abogados de Summer, recibieron la petición de poder incluir dichos fragmentos musicales, sin embargo, no accedieron y negaron el permiso para poderlos incluir dentro de la melodía:
“West es conocido como una figura pública controvertida, cuya conducta ha llevado a numerosas marcas y socios comerciales a desvincularse de él”, fue el argumento que dio la familia para rechazar la petición, pues considera que al comercializarse la canción con algunos samples de “I feel love” degradan el legado de la artista icono de la música disco.
En lo que la demanda procede, “Good (don´t die)” ya cumplió un mes reproduciéndose en plataformas, mientras que la familia de Donna busca que se le indemnice y se bloquee permanentemente la canción.
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Taylor Swift por “Shake it off”
Taylor Swift fue acusada de plagio en 2017 por su famosa canción “Shake it off”. La demanda le llegó por parte de los compositores Sean Hall y Nathan Butler, quienes acusaban que la canción de la actual novia de Travis Kelce era muy parecida a “Playas gon' play”, que escribieron en 2001 para el grupo 3LW.
De acuerdo con los compositores, entablaron la demanda, pues podría causar confusión entre el público que ambas canciones compartieran frases muy parecidas como: “players gonna play” y “haters gonna hate”. Pero la juez asignada al caso la rechazó de inmediato, pues consideró que ambas canciones y letras eran tan superfluas que no merecían juicio y que tampoco se atentaban a proteger los derechos de autor.
Tras el veredicto, Taylor emitió un comunicado en el que explicó que usó en la canción frases que había oído a lo largo de su vida y que son de uso común.
Lady Gaga por “Judas”
En 2011, Lady Gaga recibió una demanda por su canción “Judas”, pues se le acusaba de que estaba totalmente inspirada en otra de nombre “Juda”. La demandante fue Rebecca Francescatti, quien alegó que el grupo de compositores y la cantante habían tomado fragmentos de la canción que había escrito y grabado en 1999 junto a su banda Rebecca F. & the Memes y que, seis años después, en 2005, regrabó en solitario.
Además de la letra, Rebecca argumentó que otra prueba para justificar la demanda a su favor era que Brian Gaynor, su bajista en los 90, ahora prestaba servicio a Gaga y había formado parte del equipo del disco Born This Way, por lo que así se podía entender con mayor precisión el supuesto plagio.
Luego de que un juez de Estados Unidos revisó el caso y las pruebas, no tuvo más que desestimar la demanda, porque argumentó que no había suficiente evidencia como para comprobar que Lady Gaga y su equipo habían robado las ideas de Rebecca Francescatti.
Madonna por “Vogue”
Una canción ícono, de las muchas que tiene Madonna, es “Vogue” que salió a la luz en 1990.
Fue hasta 2012 cuando la Reina del pop recibió una demanda por parte del sello VMG Salsoul. De acuerdo con el medio TMZ, que tuvo acceso al documento, se argumentaba que la canción había tomado fragmentos de la melodía “Chicago bus stop (Ooh, I love it)”, compuesta en 1977 por The Salsoul Orchetra.
Aunque no es detectable al oído la supuesta similitud, la casa productora alegó que el plagio se había dado en el uso de algunos fragmentos de guitarra, que corresponden a la canción setentera, y que descubrieron gracias a que habían echado mano de la tecnología, pues con la ayuda de un programa diseñado para estos mismos fines habían podido identificar que los habían copiado. Un año después, el juez falló a favor de Madonna, al no lograr ser convencido por parte de los demandantes del supuesto plagio musical.
Bieber y Usher por “Somebody to Love”
A propósito del pasado Super Bowl, donde Usher fue el artista encargado del espectáculo de medio tiempo, el cantante fue demandado hace unos años por plagio junto a Justin Bieber por la canción “Somebody to love”, que interpretan a dúo.
La demanda fue interpuesta por Mareio Overton y Devin Copeland, quienes alegaron en una corte de Estados Unidos que ellos la habían escrito originalmente para el rapero, pero que éste nunca la grabó. Sin embargo, años después salió a la luz en voz de Bieber, por lo que pedían 10 millones de dólares como indemnización por los derechos de autor pues, aunque no era la misma melodía, sí contenía fragmentos, coincidencias líricas y además se llamaba igual.
Lo peor es que la canción de Justin y Usher se coló en la lista de los más escuchados de ese año, en el sitio 15 de los Hot 100 de los Billboards, de 2010, e incluso se le otorgó una certificación de platino por las impresiones que consiguió. Para suerte de ambos, un juez desestimó la demanda; ¿la razón? a su parecer, no había pruebas de peso para considerar el plagio.
Besos de Gurú, XOXO
