Hablemos de una mujer originaria de Ciudad del Carmen. Hablemos de una mujer exitosa. Hablemos de una gran golfista. Hablemos de Isabella Fierro.
¿Te llama la atención? Qué te parece, estimado lector, que te diga que esta mujer, durante la temporada 2023 como novata en el Epson Tour –Liga de ascenso a la LPGA–, obtuvo seis Top 10, rompió su récord personal con un score de 62 y logró su primera victoria como profesional.
Números en el golf mexicano que sólo son superados por la histórica Lorena Ochoa. Desgloso un poco más: En sus últimos cuatro eventos, acumuló un total de 49 golpes bajo par. Más contexto: Es como si tu equipo de futbol favorito estuviera a media tabla, ganara los últimos cuatro partidos de la temporada regular, clasificara a la Liguilla y ganara la final por goleada.
Gracias a estos logros, tendremos más mexicanas compitiendo en la LPGA –la máxima categoría de la rama femenil– que en cualquier otro circuito, al acompañar —durante la campaña 2024— a sus compatriotas Gaby López y María Fassi. Esto es un gran logro para las atletas mexicanas, para el golf en nuestro país, y un orgullo para XUNTAS A.C.
Detrás de estos resultados, el camino de Isabella no ha sido fácil, como no lo es para cualquier persona que aspira y trabaja para ser lo mejor que puede ser día a día. Cualquier atleta que busca competir en el máximo nivel puede identificarse. Se sabe que tener metas extraordinarias conlleva mucha disciplina, mucho sacrificio. En ocasiones, pueden llegar a llamarte “loca”. En cada tropiezo, durante tu camino, te quieren mostrar una y mil veces salidas a “una vida más normal”. Sin embargo, Isabella resistió y logró su primera meta: Trascender en la etapa más compleja y confusa, para probarse a sí misma que pertenece a la LPGA.
Para poder hacer scores de 17-bajo-par en cuatro días de competencia, se necesitan mucho talento y enfoque, pero también un ejército de apoyo. Y es ahí, y con permiso de Isabella, que le queremos agradecer a su equipo de trabajo, su familia y a todos aquellos que creyeron en ella, que le apostaron a su sueño y que —sin ninguna garantía— pusieron su tiempo y recursos para que lograra su sueño. No olvidemos que la etapa más complicada de cualquier emprendimiento es su inicio, y es donde sólo los valientes y los que piensan en grande y con entusiasmo se XUNTAN.
¡Felicidades, Isabella!