El cinismo en su máxima expresión: Javier Aguirre y Santiago Solari se convirtieron en cómplices de la desfachatez, de la mentira.
Uno, el de los multimillonarios Rayados de Monterrey ha caído en el absurdo más grande de la historia de la Liguilla: “Perdimos porque tenemos un plantel corto”, como si el equipo más costoso del país lo fuera. Una rotunda mentira que se dice para defender lo indefendible, estos sucede cuando el rotundo fracaso no se acepta y hay que distraer a la gente con declaraciones absurdas y fuera de la realidad.
El otro, el multifracasado entrenador del América no hizo más que el ridículo, tanto en el campo como en la sala de prensa del Estadio Azteca: “Es otro torneo (la Liguilla), pero fuimos los mejores en puntos”... Terrible falta de aceptación de lo que está en juego y de las obligaciones que tiene con uno de los clubes más importantes de México , del continente.
Pero no ha quedado ahí, con las palabras de entrenadores cuidachamba, sino también se ha trasladado a la directiva del América , que con un comunicado volvió a hacer molestar a la afición debido a que está lleno de absurdos, ya que se asegura se hará una evaluación de lo que ha ocurrido para tomar medidas , pero sin personalizarlo, es decir, sin el nombre y la firma del ejecutivo a cargo, lo que le daría mayor valor a este oficio, que ya de por sí, es algo ridículo.
¿Será que se harán una autoevaluación Santiago Baños y Joaquín Balcárcel? o simplemente publicaron el comunicado para salir del problema de imagen porque no tiene sustancia, no dice algo en concreto y sólo ha hecho enfurecer más a los americanistas, que de por sí terminaron frustrados por otra eliminación ante un equipo que en el papel es de menor calidad, pero que le volvió a mostrar a Solari y compañía cómo se juega esta fase final. Porque si ya se fueron de vacaciones y los resultados de dicha evaluación estarán en tres semanas, o quizá más, ya tendrán encima las fechas decembrinas y la pretemporada para el siguiente torneo, así que huele a más de lo mismo y a que el americanismo tendrá que sufrir otros seis meses con este equipo, a menos de que todo cambie y ahora el campeón sea por puntos.
En fin, en busca de defenderse terminan por revolcarse más en el lodo de la eliminación, y al no ser claros en sus conceptos o al tratar de pintar ora realidad solamente se echan encima a algunos que, todavía con la eliminación a cuestas, defendían a sus equipos pensando en que el siguiente torneo será mejor, cuando lo cierto es que no sólo fracasaron, sino que además les quieren ver la cara.