Javier Aguirre y sus muchachos deben responder en la cancha a la buena gestión de la dirección deportiva de Selecciones Nacionales para encontrar rivales de jerarquía, en la preparación a la Copa del Mundo del próximo año.
La Selección Nacional no debe desperdiciar estas oportunidades, porque —regularmente— no enfrenta a esta clase de equipos.
Es muy importante que se los tomen en serio, se juegue como si ya fuera el Mundial, para medir qué tanto pueden ofrecer nuestros futbolistas y el tipo que está al mando.
Se hizo oficial el juego contra la selección de Ecuador en Guadalajara, el 14 de octubre. Excelente adversario que, en este momento, es el segundo mejor equipo en la eliminatoria mundialista de Sudamérica, sólo por debajo de Argentina y arriba de Brasil.
Los ecuatorianos son competitivos, fuertes en lo mental y físico; juegan bastante bien.
Los sudamericanos cuentan con futbolistas reconocidos internacionalmente, como Willian Pacho, actual monarca de la Champions con el Paris Saint-Germain; Pervis Estupiñán, del Milan; y Moisés Caicedo, del Chelsea. Uno de sus pilares es Pedro Vite, hoy elemento de los Pumas.
Casi todos los que son llamados por el entrenador argentino Sebastián Beccacece, joven técnico de 44 años de edad, juegan fuera de su país. Es, sin duda, una gran selección.
Ecuador estará en el Mundial 2026, igual que Colombia, a la que enfrentará México en el estadio de los Cowboys de Dallas, el 11 de octubre.
Antes, en septiembre, vendrán los partidos contra otros dos rivales ya clasificados a la justa mundialista, en Estados Unidos: Japón, el día 6, en Oakland, y Corea del Sur, el día 9, en Nashville.
Por si fuera poco, para uno de los juegos de la Fecha FIFA de noviembre, la Selección Mexicana enfrentará a Uruguay en Torreón.
Nada mal la preparación de cara a la Copa del Mundo, por encima de lo esperado. Ojalá que la Selección esté a la altura.
@elmagazo







