El año pasado vivimos elecciones muy importantes en el mundo. Desde luego, para México, lo fueron sus propias elecciones presidenciales, legislativas y locales del 2 de junio. Las elecciones en los Estados Unidos marcaron el regreso de Donald Trump a la presidencia, cargo que asumirá formalmente en la ceremonia del próximo 20 de enero.

En 2025 tendremos menos procesos electorales en el orden global, pero serán muy importantes en términos de geopolítica internacional, especialmente en el continente americano.

Millones de votantes están llamados a las urnas para elegir a las autoridades de sus poderes ejecutivos y legislativos. Para el caso de México, como se sabe, además de las municipales de Durango y Veracruz por primera vez en su historia tendrá elecciones extraordinarias para la integración de su Poder Judicial en la jornada del 1º de junio de 2025.

¿Cuáles son las elecciones más importantes alrededor del planeta? Aquí, un panorama general sobre los procesos electorales que tendremos en este nuevo año.

En América Latina, sobresale Ecuador, en donde Daniel Novoa aspira a la reelección presidencial en sus elecciones generales del 9 de febrero. Incluso podría haber una segunda vuelta el 13 de abril. En Bolivia, es posible que el presidente Luis Arce igualmente aspire a la reelección el 17 de agosto. También ahí podría haber una segunda vuelta el 19 de octubre.

En Argentina, se elegirán integrantes de la Cámara de diputados y del Senado el 26 de octubre. Ahí se definirá si se consolida o no una mayoría legislativa afín al proyecto político del presidente Javier Milei. Chile elegirá a una nueva presidencia (que sucederá a Gabriel Boric) el 16 de noviembre, así como senadurías y diputaciones. Si hubiera segunda vuelta, se llevaría a cabo el 14 de diciembre.

Finalmente, Honduras también decidirá su presidencia, tras la finalización del periodo en el cargo de Xiomara Castro. Además, elegirá diputaciones, escaños del parlamento centroamericano, así como alcaldías y vicealcaldías en su jornada del 30 de noviembre.

El caso de Canadá es especialmente relevante debido a la reciente renuncia, el pasado 6 de enero, de su Primer Ministro, Justin Trudeau, quien se había mantenido en el poder a lo largo de casi 10 años. Canadá celebrará elecciones el 28 de octubre.

Esta elección obviamente interesa a México debido a la relación imprescindible que existe entre los países del bloque de América del Norte, en especial, en temas tan fundamentales para nuestras sociedades, como son el económico, el comercial y el migratorio.

En el continente americano, Surinam también tendrá elecciones parlamentarias el 25 de mayo.

En Europa, destacan las elecciones parlamentarias en Alemania el próximo 23 de febrero. Otros países europeos que tendrán elecciones en el 2025 son:Bielorussia, el 26 de enero (presidencia); Kosovo (elecciones parlamentarias) y Liechtenstein (elecciones generales), el 9 de febrero; Albania, el 18 de mayo (elecciones parlamentarias); Noruega, el 8 de septiembre (se elegirá a un nuevo primer ministro). También República Checa (elecciones parlamentarias) y Polonia (presidencia) tendrán elecciones, aún sin fecha confirmada, en este mismo año.

En Asia, habrá elecciones para el Senado en Filipinas el 12 de mayo. Japón tendrá elecciones legislativas el 27 de julio. También se elegirán a integrantes de parlamentos en Singapur, Kirguistán y Tayikistán.

África es el continente en el que mayor actividad comicial se desarrollará en el 2025. Habrá elecciones en Comoras, Burundi, Malaui y Seychelles, República Centroafricana, Tanzania, Togo, Costa de Marfil, Camerún y Egipto.

Es un lugar común afirmar que las democracias viven problemas de desencanto en las sociedades de todo el mundo. Sin embargo, más allá de las diversas problemáticas que tienen cada uno de los países, los sistemas electorales siguen siendo los pilares para su mantenimiento y para su esperanzadora consolidación.

Siempre he opinado que las democracias no pueden ser pensadas como puertos de llegada.

Se trata de sistemas que deben entenderse como procesos en construcción permanente, que exigen de la ciudadanía y de las instituciones una consciencia, cultura y una acción constante a favor de sus valores identitarios.

Entre esos valores, se encuentran: el voto popular libre y secreto, la igualdad política, la leal competencia en comicios periódicos y justos, instituciones electorales confiables, el respeto a los derechos humanos, el equilibrio de los poderes, así como el pluralismo político y social.

El panorama de las elecciones en el mundo nos mantendrá atentos en este 2025 a las experiencias comparadas, a nuevos alicientes para seguir luchando por la cultura del voto libre y justo, así como para mantener a la democracia como un patrimonio universal de nuestra civilización.

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