Dos ciudades con muy distintas tradiciones y costumbres, que se encuentran a miles de kilómetros de distancia, se unieron al son del boxeo. Si bien, hay una enorme diferencia entre un evento y otro, les puedo asegurar que habiendo vivido pugilismo de manera presencial en Arabia Saudita y Tijuana, el ambiente de la fronteriza ciudad no se compara con nada, así como no podemos comparar la magia que arroja el Medio Oriente.
Beterbiev y Bivol nos regalaron una de las más encarnizadas revanchas. Elementos como la depurada técnica, una condición física a toda prueba y dos distintas estrategias, nos hablan de una de las peleas más memorables en la historia.
Bivol se saca la espina y se convierte en el campeón indiscutible de las 175 libras.
Luego del resultado, es cuestión de tiempo para que nos anuncien la tercera guerra entre estos dos históricos, que caballerosamente dirimieron sus diferencias boxísticas disputando todos los cinturones de la categoría de las 175 libras.
No olvidemos que en ring side estuvo presente David Benavidez, campeón interino CMB y AMB, para reiterar su intención de enfrentar al ganador de la histórica reyerta.
Tijuana tuvo terremoto boxístico. Levantarse de un nocaut es muy complicado y, si le agregamos que el rival en turno comparte nacionalidad y ya te noqueó, no es algo sencillo, pero lo sencillo es lo que menos le gusta a Luis Pantera Nery, un tijuanense todo terreno que, apoyado por su gente y Fernando Beltrán (CEO de Zanfer), literalmente destrozó en siete giros al guerrero nipón Kyonosuke Kameda. La batalla fue bestial de principio a fin, pues los dos salieron a arrancarse la cabeza, pero la pegada y técnica de Nery, así como el apoyo de su gente y el enorme ingrediente de tener a la familia Quirarte en su esquina, acabó por darle a la Pantera fronteriza una victoria que se convirtió en un bálsamo para su alma y su carrera.
Nery salió con la mano y el corazón en alto. El exmonarca de las 118 y las 122 libras tenía un brillo distinto cuando lo visitamos en su vestuario, donde todavía le escurrían las gotas de sudor, resultado de la batalla. Nos dijo que se preparen, porque en diciembre habrá pelea por campeonato mundial.
Algo que me llamó profundamente la atención es el cariño y apoyo que le brindaron a Nery. Jaime Munguía llegó con Jaimito para apoyar a Nery y —de paso— comentar la pelea. Personalidades de la talla del ingeniero Jorge Hank Rhon y su hijo Juan Carlos Hank Krauss, le dieron un toque muy especial a la noche, pues como cualquier fanático del boxeo, impulsaban a su paisano.
Evidentemente, yo no peleé el anterior fin de semana, pero las emociones que nos dejaron Riad y Tijuana me hicieron vivir los combates como si yo hubiera estado arriba del cuadrilátero.
Riad y Tijuana transpiraron boxeo, y boxeo del bueno.
@ErnestoAmador
