El próximo lunes 20 de enero marcará un antes y un después en la relación de México con los Estados Unidos. Ese día, Donald Trump jurará como presidente número 47 de los EU y comenzará un nuevo capítulo en la historia de ambos países en el que debemos ser lo suficientemente maduros para cuidar nuestros intereses y demostrar al mundo que podemos superar nuestras diferencias, con unidad y cohesión social.
Acción Nacional, como oposición, siempre hemos expresado nuestra completa disposición a sumarnos en los temas que son de interés general para México. Sin embargo, lo que hemos recibido como respuesta es un no rotundo al diálogo por parte de la presidenta Claudia Sheinbaum.
Es importante señalar que en toda democracia, el diálogo y las diferencias políticas forman parte de la convivencia diaria. Porque tan importante es gobernar por parte del partido en el poder, como la crítica constructiva de la oposición al poder. Eso permite que la pluralidad de pensamiento e ideas convivan en un ambiente de libertad. Muchas mexicanas y mexicanos, durante décadas, lucharon porque viviéramos en esta realidad democrática, pero sobre todo, para que esa libre convivencia nos llevara a estar unidos, no divididos.
Hoy estamos ante una situación histórica, en donde mucho del futuro del país dependerá de las negociaciones y acuerdos que se generen con el próximo gobierno de Donald Trump. Tomemos en cuenta que es la segunda vez que ocupa la presidencia, tiene más experiencia pero sobre todo más claridad de como hacer posible su promesa de “make America great again”, sin importarle pasar por encima de sus socios comerciales.
En ese contexto, que desde antes de su toma de protesta ya estamos viviendo con amenazas de aranceles y expresiones como cambiar el nombre del Golfo de México, es que resulta indispensable cerrar filas como país para llegar con una gran unidad nacional a las reuniones que tendrán la presidenta Sheinbaum y el presidente Trump.
El respeto que exigimos desde ahora como país, debemos ganarlo primero demostrando que tenemos un gobierno que nos representa a todas y todos los mexicanos. Y eso incluye necesariamente que exista una verdadera convivencia política, donde la oposición no sea ignorada en el debate ni aplastada en votaciones mayoritarias.
De continuar con estas acciones, el gobierno no contará con la fuerza social que requiere para lo que viene. La polarización social en que nos encontramos como país será utilizada por Donald Trump como su principal arma para obtener la mayor ventaja en las negociaciones.
La solución la tiene la presidenta Sheinbaum. En el PAN reiteramos nuestra disposición de apoyarla porque queremos que le vaya bien a México. Hagamos realidad una Unidad Nacional que la respalde para que defienda los intereses de nuestro país ante las presiones de Donald Trump.
Todas y todos los mexicanos se lo vamos a reconocer, pero sobre todo, le permitirá contar con todos los sectores del país como aliados para que defienda a México de los embates de EU. Afrontemos nuestro futuro como país con una fuerte Unidad Nacional, porque la historia nos ha enseñado que unidos los mexicanos siempre salimos adelante.
Senador de la República y Vicecoordinador del Grupo Parlamentario del PAN