El comercio internacional es un gran generador de empleos, salarios altos y bienestar para los mexicanos, debemos impulsarlo, y ello pasa por respetar los acuerdos internacionales, fortalecer nuestro sector energético con las energías renovables y al Estado de Derecho para que sigan creciendo nuestras exportaciones.
No obstante, se han presentado tres complicaciones con el comercio internacional recientemente.
Para empezar, no estamos aprovechando la gran oportunidad del auge del nearshoring . Muchas empresas quieren mover sus fábricas de Asia a México para estar cerca de Estados Unidos, porque es más caro, riesgoso, lento y contaminante traer mercancías desde Asia, especialmente ahora que EE. UU. y China se encuentran en medio de una guerra comercial.
Hay muchos especialistas que han estudiado la gran oportunidad que esto representa para nuestro país, por ejemplo, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) estima que las exportaciones de México pueden crecer en 40 mil millones de dólares (mdd) por el nearshoring.
La financiera Morgan Stanley estima que el PIB de México podría crecer hasta 10% en los próximos 5 años por el nearshoring . De acuerdo con un artículo del Wall Street Journal , cerca del 70% de los directores de empresas en Estados Unidos piensan en relocalizar plantas hacia México.
Como resultado de la guerra comercial, de 2018 a 2021 las exportaciones de China a EE. UU. se redujeron alrededor de 15%, pero las exportaciones de México a EE. UU. apenas crecieron 4 por ciento. Son otros países asiáticos quienes nos están ganando la huida de las fábricas de China, pues sus exportaciones hacia EE. UU. crecieron más de 25% de 2018 a 2021.
Segundo. Para complicar más las cosas, el gobierno mexicano aumenta sus conflictos con Estados Unidos.
El gobierno federal cambió las reglas en nuestro sector eléctrico. Antes se compraba primero la electricidad más barata y se permitía a los privados invertir en México en producción eléctrica. Ahora se privilegia la electricidad de un sólo generador, la Comisión Federal de Electricidad , por más cara que sea y se ha afectado a los estadounidenses que ya habían invertido en México. Es decir, les cambiaron las reglas del partido ya que había iniciado.
El gobierno de EE. UU. ya inició un proceso de resolución de disputa porque estamos violando el Tratado de libre comercio T-MEC, lo que podría costarnos miles de millones de dólares a los ciudadanos mexicanos.
Pero eso no es todo, nuestro vecino del norte nos pide solucionar otra diferencia que también podría llevarnos a una disputa en el marco del T-MEC , pero ahora por prohibir alimentos genéticamente modificados y el uso del herbicida llamado glifosato.
En el artículo de la semana que viene voy a profundizar sobre este tema, por ahora quiero remarcar que esta prohibición afectaría a los mexicanos al provocar un fuerte aumento en el precio de los alimentos y otro conflicto con nuestros vecinos que nos compran el 80% de lo que exportamos.
Tercero. En los primeros 10 meses de 2022 México ha registrado el máximo déficit comercial del que se tenga registro, esto significa un desbalance entre lo que le compramos al mundo, las importaciones, y lo que el mundo nos compra, nuestras exportaciones.
De enero a octubre de este año nuestras importaciones fueron 27 mil millones de dólares superiores a nuestras exportaciones, es un déficit del 2% de nuestro PIB. La última vez que tuvimos un déficit comercial grande fue en 1994, cuando las importaciones fueron 15 mil mdd mayores que las importaciones en los primeros 10 meses del año.
Desde 1994, el déficit comercial se había mantenido en un máximo de 13 mil mdd, pero en 2022 se ha disparado a más del doble de lo que tenemos normalmente.
Este déficit histórico se explica principalmente por un aumento en las importaciones petroleras. Yo he insistido en transitar hacia una economía menos dependiente del petróleo y más comprometida con las energías renovables, con lo que tendríamos una economía más estable, próspera y sustentable.
Además, fortalecer las energías renovables nos evitaría muchos problemas con nuestro mayor socio comercial, Estados Unidos, y nos ayudaría a aprovechar la gran oportunidad que representa el nearshoring .
Como decía al inicio del artículo, el comercio internacional es muy importante para México, las exportaciones representan 40% de nuestro PIB y los empleos ligados a las exportaciones tienen salarios 30% más altos que el resto de los empleos en México. Si queremos sacar a millones de mexicanos de la pobreza hay que apostar por las exportaciones.
Una cosa son los cuentos y otra cosa son las cuentas. Por más cuentos que se echen, las cuentas no salen bien y nuestra economía hoy sigue siendo 2% inferior a 2018, mientras que en países como Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Panamá, Perú y Estados Unidos su economía ya es entre 4% y 14% superior a 2018. Por ello es necesario un cambio de rumbo.