Nos dicen que ya quedó ocupado el lugar de la Subsecretaría de Programas de Alcaldías y de Reordenamiento de la Vía Pública de la Secretaría de Gobierno capitalina. Se trata de Adolfo Llubere, quien, entre otros puntos, fue candidato a la alcaldía Tlalpan por el partido Fuerza por México en 2021, pero también colaborador del gobierno de Cuauhtémoc Cárdenas y director de Fomento Cultural cuando la hoy presidenta Claudia Sheinbaum fue alcaldesa de Tlalpan. Ahora, desde el gobierno de Clara Brugada, a don Adolfo le tocará poner orden al comercio en la vía pública y la relación con las alcaldías. ¿Lo logrará?
Ven mano negra de funcionarios de la alcaldía de Iztacalco en la Prepa 2
Nos comentan que desde los altos mandos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) hay una alerta de que funcionarios de la alcaldía Iztacalco tienen las manos metidas en la preparatoria número 2, pues han detectado que se está alentando artificialmente un conflicto que afecta las actividades académicas en dicho plantel desde hace unas semanas. Estas maniobras que son violatorias de autonomía universitaria, nos señalan, son impulsadas por personas cercanas a la edil morenista Lourdes Paz. Nos aseveran que autoridades de la alcaldía, en coordinación con sindicalizados de la Máxima Casa de Estudios, buscan obtener, mediante las presiones, becas para el ingreso de estudiantes a la iniciación universitaria y al bachillerato UNAM y presuntamente estarían detrás de un grupo de personas embozadas que maniobran para prolongar el paro de actividades hasta que la dirección de dicha institución cumpla con la demanda de obtener becas alimentarias.
Otro reto para la fiscal capitalina
Nos platican que además de terminar los proyectos que dejó inconclusos la pasada administración en materia de combate a la violencia contra las mujeres, la fiscal capitalina Bertha Alcalde tendrá que establecer mecanismos para diferenciar entre las mujeres que sean víctimas reales de delitos y aquellas que buscan beneficiarse indebidamente de la protección a este grupo vulnerable. De este último, un ejemplo es el caso de Rebeka Zebrekos , quien en 2020 exigió al padre de su hija la cantidad de 7 millones de pesos para que pudiera conocerla y en caso de no cumplir con la entrega de dichos recursos lo denunciaría por violencia familiar, pese a que, nos aseguran, desde 2014 el padre de la niña no ha tenido contacto alguno. No es menor el reto.