A 19 años de que se creó el Museo Interactivo de Economía (Mide), que dirige Silvia Singer, nos cuentan que le darán una manita de gato. A partir de este lunes sus salas de exhibición van a permanecer cerradas para rediseñar sus espacios y fortalecer su propuesta educativa. Pero el museo continuará activo a través de sus plataformas digitales, el Foro Educativo, la Tienda Mide y el servicio de renta de espacios. Nos hacen ver que el éxito que ha tenido su cercano competidor, que se encuentra a unas cuadras, los obligó a renovarse o morir, debido a que el Museo de Banco de México (Banxico), a cargo de Anareli Acosta, constantemente se actualiza con ideas frescas y novedosas, a pesar de que ambos se han visto afectados por las marchas y plantones del magisterio.
Alertas SAT y Prodecon
Varios contribuyentes están recibiendo correos electrónicos para estafarlos. Nos platican que, a nombre del departamento de Gestión Fiscal de una institución llamada Administración Federal de Ingresos Públicos (AIFIP), se contactan con los causantes para informales que se generó un nuevo documento fiscal, por lo que resultó en una multa por cierto monto, que muchas veces llega a ser de 10 mil pesos. Se les pide acceder al reporte completo haciendo clic en un enlace, que sirve más bien para que caigan en la trampa, algo que, nos dicen, deberían trabajar en conjunto el Servicio de Administración Tributaria (SAT), de Antonio Martínez Dagnino, y la Prodecon, que tiene como presidente en funciones a Gilberto Camacho, para evitar que salgan afectados los pagadores de impuestos.
Arrancan pláticas para el T-MEC
La siguiente semana, nos comentan que la Secretaría de Economía, que encabeza Marcelo Ebrard, tendrá una reunión con la industria automotriz para intercambiar ideas sobre cómo se puede incrementar el contenido nacional en la fabricación de autopartes y vehículos. Esto con la intención de irse preparando para la revisión del T-MEC, programada en septiembre, pues se anticipa que el gobierno de Estados Unidos pondrá sobre la mesa objetivos muy ambiciosos de contenido regional, para sacar de la producción la mayor cantidad de unidades provenientes de China y otras naciones asiáticas. También se espera que Donald Trump ponga un porcentaje mínimo de contenido estadounidense en el ensamble de coches. El problema, nos explican, es cómo hacer cuadrar la ecuación, ya que el país vecino quiere mayores piezas estadounidenses y nosotros más mexicanas.