En medio del debate que se ha dado sobre las refinerías de Petróleos Mexicanos (Pemex), nos cuentan que hay que poner en perspectiva la situación de las ubicadas en Cadereyta y Tula. En el Sistema Nacional de Refinación (SNR) de la petrolera a cargo de Octavio Romero Oropeza, la refinería hidalguense es la que más refinados elabora, con participación de 22%, y le sigue la de Nuevo León, con 19.5%. Son, además, las dos refinerías más criticadas en materia de contaminación. Es una realidad que este tipo de plantas contamina, pero sin ellas, más gasolinas y petrolíferos deberían importarse, lo que también tiene un impacto económico. Ante esta discusión que se generó, nos comentan que se deben exponer soluciones técnicas y razonables.
Presidenciables, con agenda llena
Ya con campañas a todo vapor, nos dicen que los candidatos a la Presidencia tienen problemas para asistir a todos los eventos de las cámaras y confederaciones del sector privado. Tanto Xóchitl Gálvez como Claudia Sheinbaum ya estuvieron con el Consejo Coordinador Empresarial (CCE), organismo cúpula presidido por Francisco Cervantes, pero nos dicen que con apenas pocos meses de campaña no ajusta el tiempo para estar en todos los eventos. Por ejemplo, Sheinbaum iba a asistir al Congreso Mexicano de la Industria de la Construcción el próximo jueves, pero ya avisó que no podrá estar ahí, nos reportan. Así ha pasado con todos los candidatos, de forma que la frase más escuchada en el sector privado es que, “por cuestiones de agenda, se cancela la participación”.
Meta de autos eléctricos, complicada
Nos platican que Electro Movilidad Asociación (EMA), presidida por Shirley Wagner, se planteó como meta para 2030 que la mitad de vehículos nuevos que se vendan en el país sean eléctricos. Es un objetivo que la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), de José Zozaya, percibe lejano, nos comentan. Para la AMIA, sin una política integral para promover la electromovilidad, los vehículos con tecnologías alternativas pueden alcanzar apenas 20% del mercado de autos nuevos, considerando híbridos y eléctricos. Si el gobierno apoyara la producción, exportación y venta, además de una red de recarga, se lograría que 40% de los autos nuevos vendidos sean eléctricos, pero no hay señales de un esfuerzo en esa vía.