El tiempo sigue corriendo y no hay novedades sobre el arranque de la Dirección General de Formación y Gestión Cultural que, se supone, debe estar a cargo de Lucina Jiménez, exdirectora del INBAL. La nueva dirección debió comenzar a operar el 16 de octubre pasado, según la propia Secretaría de Cultura, pero aún no arranca... no se sabe en qué consistirán sus funciones. Para acabar con las conjeturas y el hermetismo se solicitó desde hace semanas una entrevista con Jiménez en la Secretaría de Cultura, pero la dependencia ha señalado que no es posible porque la oficina aún está en creación... Qué curioso que, aún sin oficina, Lucina Jiménez goce de un salario mensual de 104 mil 821 pesos. ¿Qué está haciendo la funcionaria para cobrar esta nada despreciable suma por lo menos desde noviembre? En las nóminas federales que pudimos consultar no se detalla su cargo, sólo la categoría: “Director general y coordinador general K12”. Si ya comenzó a trabajar en la creación de la dirección, por qué no hay más transparencia y dar detalles a la opinión pública sobre la operación de esta misteriosa dirección? Mientras eso ocurre, se corre el riesgo de comenzar a especularse sobre un puesto en la aviación y no precisamente en una aerolínea conocida...
Robo de patrimonio y falta de presupuesto
Un nuevo caso de robo de patrimonio se suscitó en el sitio arqueológico de La Pinta, en Cuatro Ciénegas. Con herramientas especiales, taladros y esmeriles, ladrones dañaron pinturas rupestres y desprendieron la figura de una mano. En redes sociales se reportó que el sitio no tiene ningún tipo de vigilancia. Tras el robo, el INAH lanzó un comunicado donde confirmó la sustracción de la pieza e informó que hizo las denuncias. La falta de vigilancia en sitios arqueológicos es un hecho, y se agrava por la falta de presupuesto en todo el INAH. Más allá de condenar el robo, debemos saber qué hacen las autoridades para vigilar nuestro patrimonio. (Escríbanos a columnacrimenycastigo@gmail.com)