“En cuanto el periodismo se ejerce como un poder, pierde su esencia y se convierte en otro más de los poderes que se disputan el control de la sociedad mediante el uso de la fuerza, del dinero o de las argucias de los políticos”.

Javier Darío Restrepo

En infinidad de ocasiones, he comentado en este mismo espacio sobre mis primeras lecturas; desde "El llano en llamas" y "Pedro Páramo" de Don Juan Rulfo, hasta "El Principito" de Don Antoine de Saint-Exupéry, durante mi formación primaria. Continuando con "Los hijos de Sánchez" de Don Óscar Lewis, "Palabras Mayores" de Don Luis Spota y finalmente "El Padrino" de Don Mario Puzo, que básicamente son los seis primeros libros que leí, según recuerdo hasta los 17 años, francamente nada qué presumir.

Con esa misma edad descubrí -gracias a mi librero de cabecera Don Gerardo, titular de la librería en mi natal Tijuana que honraba su nombre- a posiblemente el mejor novelista, además del más exitoso de mi generación, cuyas iniciales eran Don Harold Robbins (Nueva York, 21 de mayo de 1916 / Palm Springs, 14 de octubre de 1997) autor de exactamente 25 BEST Sellers, de los cuales, cuenta la leyenda se vendieron cerca de 1000 millones de copias, entre 1948 y 2006 incluso después de su triste desaparición acontecida en 1997, como señalamos líneas arriba.

Por cierto, sus libros fueron traducidos a más de 30 idiomas, nada pescadito, como dice un reconocido periodista mexicalense, del que ya les contaré algún día de estos, Queridas Amigas, Estimados Amigos, Apreciados Lectores. De esas poco más de dos docenas de obras de Robbins, estoy convencido de que he leído mínimo más de la mitad a lo largo de los últimos 45 años, aunque son 8 en particular que aún guardo en la memoria y particularmente en el corazón, que les compartiré a continuación con una breve descripción de su alucinante contenido.

El primero de ellos, lleva por título (con poca fortuna en su traducción al español, como en la mayoría de los casos) "Los Insaciables" (1961). En este libro, nos narra la trayectoria novelada de un personaje que hizo historia tanto en el cine de Hollywood, como en la aviación y los negocios, además de ser considerado en su momento como el hombre más rico del mundo, con el nombre de Don Howard Hughes (Houston, 24 de diciembre de 1905 / 5 de abril de 1976 - supuestamente) cuya vida fue magistralmente protagonizada con una espléndida actuación de Leonardo DiCaprio (Los Ángeles, 11 de noviembre de 1974) en la película "El Aviador", considerando que pudo basarse en el guión que pudiera haber escrito con su maravilloso talento Don Harold Robbins.

El siguiente libro del autor que tuve en mis manos, ya con 18 años, realmente me impactó por la narrativa de un país que yo desconocía y que curiosamente tuve la fortuna de visitar por cuestiones laborales en el año 2010, gracias a mi máximo mentor, en más de 10 ocasiones: República Dominicana. El personaje central de la trama es el famoso playboy Porfirio Rubirosa (San Francisco de Macorís, 22 de enero de 1909 / París, 5 de julio de 1965) que se convierte en una leyenda internacional como diplomático y por sus célebres matrimonios con dos o tres de las mujeres más emblemáticas y ricas de la época. El título del libro "Los Aventureros" (1966), y sinceramente lo digo con el mayor de los respetos, está a la altura de "La Fiesta del Chivo" del Nobel Don Mario Vargas Llosa (Perú, 28 de marzo de 1936), nos cuenta las atrocidades del desalmado gobernante Rafael Leonidas Trujillo (San Cristóbal, 24 de octubre de 1891 / Santo Domingo, 30 de mayo de 1961) como dictador de esa hermosa tierra.

La tercera obra que devoré totalmente fue la titulada "El Pirata" (1974). Ahí nos describe vivazmente a un personaje que se asemeja a una figura que marcó totalmente el siglo XX, quizá el griego más reconocido a nivel universal y que fue inmortalizado en el celuloide por Don Anthony Quinn (Chihuahua, 25 de abril de 1915 / 3 de junio de 2001, Boston). Me refiero a mi admirado Don Aristóteles Onassis (20 de enero de 1906, Karataş, Esmirna, Turquía / 15 de marzo de 1975, París) que no tengo la menor idea de cómo le hizo para conquistar a mi también admirada Doña Jacqueline Bouvier Kennedy-Onassis (Southampton, 28 de julio de 1929 / Nueva York, 19 de mayo de 1994).

Para finalizar esta entrega, que para variar ya se alargó, me despido garantizando las increíbles descripciones de cinco obras literarias en nuestra próxima columna. Eternas e infinitas gracias por sus finas y amables lecturas.

Hasta siempre, buen fin.

Únete a nuestro canal ¡EL UNIVERSAL ya está en Whatsapp!, desde tu dispositivo móvil entérate de las noticias más relevantes del día, artículos de opinión, entretenimiento, tendencias y más.
Google News

TEMAS RELACIONADOS