Ayer, la Cofepris informó el desmantelamiento de una red interna de corrupción entre funcionarios y una empresa para obtener ventaja sobre otras y emitir resoluciones en su favor. Todo bien hasta ahí, sin embargo, no hizo público el nombre de la empresa involucrada o los medicamentos o productos que recibían “evaluaciones menos estrictas”. Nos dicen que todos esperan que el titular de la Unidad de Inteligencia Financiera, Pablo Gómez, se recupere pronto para ver si acude a la conferencia mañanera del Presidente para dar a conocer los nombres de las empresas involucradas y los montos de las cuentas de los funcionarios corruptos, o será que esa política de comunicación solo se utiliza cuando se trata de periodistas incómodos para el sistema a los que considera “enemigos jurados del gobierno”.
Alito el valentón
Ahora que anda tan envalentonado el presidente nacional del PRI, Alejandro Moreno, amenazando con expulsar a sus críticos, quizá no ha reparado en que uno de ellos, Manlio Fabio Beltrones, será un senador en la próxima legislatura, y que el grupo parlamentario priista tendrá, según las proyecciones del INE, 16 senadores, por lo que la exclusión de Beltrones del partido adelgazaría la bancada del PRI, y abriría la puerta para que el exgobernador de Sonora se uniera a otra bancada o navegara como independiente los seis años de la legislatura. Nos hacen ver que don Alito Moreno anda tan ofuscado que además de amenazar con una purga en el partido hace acusaciones graves sobre los militantes que lo critican, lo que ayuda a desgastar, aún más, la muy desgastada imagen del PRI.
Una complicada tarea para Rosa Icela Rodríguez
Vaya brete en el que el presidente López Obrador puso a la secretaria de Seguridad, Rosa Icela Rodríguez. Tras una pregunta de uno de los asistentes a la mañanera (que más que pregunta fue una gestión) le dijo que Raymundo Collins, extitular del Instituto de Vivienda (Invi) e investigado por la Fiscalía capitalina por presunto enriquecimiento ilícito y quien se encuentra prófugo en Estados Unidos, pedía una oportunidad para presentar al fiscal Alejandro Gertz Manero sus “pruebas de inocencia” y “su verdad”. Ante esta “petición”, el presidente López Obrador instruyó a la secretaria que atendiera esa solicitud. El caso, nos dicen, es que la funcionaria federal tendría que entrar en contacto con un presunto delincuente que es acusado por la administración de la entonces jefa de Gobierno de la Ciudad de México, y hoy virtual presidenta electa, Claudia Sheinbaum, quien además designó a doña Rosa Icela como la próxima secretaria de Gobernación. Complicada tarea.
Sheinbaum busca mayor acercamiento con empresarios
Nos comentan que, la virtual presidenta electa, Claudia Sheinbaum, se encuentra definiendo con Ana María Lomelí y Altagracia Gómez un esquema para intensificar su acercamiento con empresarios para exponer los proyectos que busca ejecutar durante su gobierno. La idea, nos explican, es despertar el interés de invertir en sus programas de infraestructura y pedirán que las principales cámaras empresariales también propongan sus intereses para trabajar en conjunto. El compromiso, nos dicen, será priorizar a los empresarios mexicanos.