En su primer encuentro en un acto público con la presidenta Sheinbaum, luego de la “pausa” que le impuso el expresidente López Obrador, el embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, llegó con pies de plomo a Palacio Nacional.
Ante las preguntas de la prensa sobre la reforma al Poder Judicial, el diplomático prefirió no ahondar sobre el tema.
Nos recuerdan que una de las razones, por las que el expresidente decidió “pausar” su relación con el embajador estadounidense, fue que advirtió que la reforma judicial pondría poner en riesgo la democracia y serviría a la delincuencia organizada y los carteles de las drogas.
Ya con el nuevo gobierno, la semana pasada le dio un “estate quieto” al embajador Salazar, al suspender cualquier comunicación directa entre él y los miembros del gabinete y demás funcionarios del gobierno, sin antes pasar por la autorización de la Secretaría de Relaciones Exteriores.
Al llegar esta mañana a Palacio Nacional para la reunión de alto nivel, Ken Salazar se limitó a responder que tiene “alegría” de estar con el equipo de Claudia Sheinbaum… aunque aseguró que después haría comentarios sobre la reforma judicial.
Ya se verá si después de sus nuevos comentarios don Ken sigue en pausa, le ponen “play”, o de plano, “stop”.
grg