A pesar de los grandes avances logrados en el tratamiento del cáncer, sigue siendo la segunda causa de muerte en el mundo, responsable de casi 10 millones de fallecimientos en 2020, según cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS)1. Y se prevé que para 2030, el cáncer se convierta en la principal causa de muerte en el mundo, con un aumento de 21.6 millones de nuevos casos al año2. Los países de ingresos bajos y medios son los más afectados, ya que, de las casi 10 millones de muertes relacionadas con el cáncer en el mundo en 2020, 70% se produjeron en ellos.3 Esto se debe en gran parte a la falta de una respuesta integral que promueva evitar factores de riesgo, la detección temprana y el tratamiento de la enfermedad para salvar vidas. Estos países disponen de recursos limitados para responder a los inmensos retos que representa el cáncer para los sistemas nacionales de salud. Como consecuencia, los ciudadanos son diagnosticados tarde, o en ocasiones no tienen acceso al tratamiento adecuado, sin hablar de las necesidades psicosociales y de cuidados de los pacientes.
En lo que respecta al primer punto, la OMS estima que entre el 30 y el 50% de los cánceres están relacionados con factores de riesgo como: el consumo de tabaco y alcohol, la mala alimentación (baja ingesta de frutas y verduras), la falta de actividad física, la exposición a la radiación solar, así como infecciones crónicas de ciertos virus (como el VPH para el cáncer cervicouterino o la hepatitis para el cáncer de hígado). Tener una alimentación balanceada, mantener un peso sano, evitar el consumo de tabaco y el alcohol, así como protegerse de factores ambientales como los rayos solares, son algunas de las acciones que se pueden tomar para reducir el riesgo de desarrollar esta enfermedad.4
En segundo lugar, hablemos del tema de la detección. En México, se estima que más de 83 mil personas mueren por cáncer cada año, siendo la tercera causa de mortalidad en el país. Pero hay un dato aún más preocupante: en nuestro país, de acuerdo con cifras oficiales, 70% de los casos de cáncer se detectan en etapas avanzadas, lo que reduce las posibilidades de curarlos y encarece su tratamiento.5 Muchos tipos de cáncer, y en particular el cervicouterino, el cáncer colorrectal y el de mama, pueden tratarse de manera eficaz si son detectados a tiempo. Por ejemplo, el cáncer de mama se detecta mediante autoexploración mensual, examen clínico anual a partir de los 25 años y mastografía bianual en mujeres de 40 a 69 años; mientras que el cáncer cervicouterino se detecta mediante la prueba de Papanicolaou en mujeres de 25 a 64 años o prueba del VPH en mujeres de 35 a 64 años. Es fundamental que estas pruebas de laboratorio se realicen de manera sistemática para salvar vidas.
En tercer lugar, en lo que respecta al tratamiento del cáncer, existe desafortunadamente una brecha significativa en la disponibilidad de tratamiento entre países de altos y bajos ingresos, pues si bien en más del 90% de los primeros un tratamiento integral está disponible, éste es el caso únicamente del 15% de los segundos. En el caso de México, según el sistema de salud al que estén afiliados, muchas personas con cáncer tienen que desplazarse a otras ciudades para recibir atención médica, lo que implica costos físicos, emocionales y financieros elevados. Además, los tratamientos, las terapias, los tiempos de atención, los niveles de efectividad y los cuidados paliativos dependen, en gran medida, del tipo de aseguramiento de los pacientes.
Por último, quisiera abordar el tema de las necesidades psicosociales y de cuidados de los pacientes. El cáncer es más que un simple diagnóstico: se trata de un asunto profundamente personal. Detrás de cada caso, hay una historia única: de resiliencia, de curación, de amor y mucho más. Desafortunadamente, las personas con cáncer no siempre se sienten escuchadas, vistas o comprendidas. Por ello, es fundamental promover un enfoque médico centrado en las personas, que integre plenamente las necesidades únicas de cada individuo, y que tome en cuenta también aspectos emocionales y psicológicos en las diferentes etapas de las personas que viven con cáncer, desde el diagnóstico hasta la recuperación. En este sentido, nuestra campaña del Día Mundial contra el Cáncer tiene como slogan “Unidos por lo único”. Su objetivo es colocar a las personas en el centro de la atención y explorar nuevas formas de marcar la diferencia.
Con ello en mente, Merck México ha firmado un convenio de colaboración con Cancer Warriors y tuvimos el honor de ser patrocinadores oficiales de su segunda carrera con causa, que buscó recaudar fondos para programas de detección temprana del cáncer de mama, próstata y cervicouterino en la población vulnerable de México; así como concientizar sobre esta enfermedad. Detrás de cada paciente hay una historia, por eso hemos preguntado a los participantes: ¿tú por quién corres esta carrera? Más de dos mil personas participaron entre pacientes, familiares y personas que quisieron sumarse a esta lucha, quienes corrieron por la esperanza y con el deseo de generar un cambio para los pacientes con cáncer. Los invito a formar parte de este movimiento y desde sus respectivas trincheras, actuar para que la detección oportuna y el tratamiento del cáncer sean accesibles para todas y todos.
Director General de Merck México
Referencias:
1 Hoja de datos sobre “Cancer”, Organización Mundial de la Salud, 3 de febrero de 2022.
2 “Declaration”, World Cancer Research Day.
3 Agencia Internacional de Investigación sobre Cáncer de la Organización Mundial de la Salud. Número estimado de muertes en 2020, de todo tipo de cáncer. Cancer today. Publicado en 2020.
4 Instituto Nacional de Cancerología. INFOCÁNCER 2022. Disponible en:
5 Instituto Nacional de Salud Pública, Día Mundial contra el Cáncer 2024: Por unos cuidados más justos. Febrero de 2024.
6 World Cancer Day, United by Unique Campaign.