Con motivo de la iniciativa “Un día sin nosotras”, vale la pena conocer la situación del empleo formal que tienen las mujeres en la economía del país. Para ello se consultó la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) del último trimestre del 2019. De 55 millones 683 mil 450 mexicanos ocupados en ese entonces, 39.5% correspondió a la participación de las mujeres en alguna actividad económica. Entre las cuales están comercio al por menor, servicios financieros y de seguros, servicios de salud y asistencia social, servicios de hospedaje y preparación de alimentos y otros servicios, excepto gubernamentales; cabe mencionar que, en todas ellas, las mujeres superan en participación a los hombres. Sin embargo, en actividades especializadas, que son consideradas tradicionalmente como mejor pagadas, como son los servicios profesionales, científicos y técnicos, el porcentaje de ocupación para mujeres es de 40% y el 60% restante lo ocupan los hombres. Llama la atención que la el empleo en corporativos se divide por igual entre hombres y mujeres.
También es importante recordar que en los últimos años el porcentaje de la población femenina ocupada en el país aumentó porcentualmente pasando de 38.5% en el cuarto trimestre de 2011 a 39.5% para el mismo trimestre de 2019. A pesar del aumento, conseguir un empleo formal no ha sido fácil para ellas ya que se complica con la edad, el nivel de instrucción, la localidad donde reside (ciudades medias de más de 100 mil habitantes) e incluso el parentesco. Al respecto la ENOE señala que en ciudades medias el porcentaje de mujeres sin acceso a trabajos formales los resultados más altos los tienen mujeres entre 15 y 19 años (70.11%). La misma tendencia se ve en aquellas mujeres que tienen más estudios. Se aprecia que es más fácil conseguir un trabajo formal si se tienen estudios de bachillerato y educación superior. Se observa que ocho de cada 10 mujeres que tienen primaria incompleta no consiguen trabajo formal, mientras que con instrucción de educación media y superior solamente a tres de cada 10 se les dificulta conseguir un trabajo formal.
En cuanto el nivel de ingresos, en el cuarto trimestre de 2019 solamente 2.5% de las mujeres ganaba más de cinco salarios mínimos, mientras que, para el mismo periodo, los hombres representaban 4.3% (Inegi). No obstante, es interesante observar que la relación cambia dependiendo del nivel de estudios. Recordemos que el porcentaje más alto de la población ocupada se ubica en el rango entre uno y dos salarios mínimos. Con primaria completa del total de hombres ocupados (5 millones 930 mil 85) solamente 35.63% (2 millones 113 mil 423) se ubicaban en ese rango (Inegi). En el caso de las mujeres, tenemos que 33.8% (un millón 148 mil 895) de un total de 3 millones 390 mil 102 mujeres ocupadas ganaban en ese rango de ingresos. Sin embargo, con estudios de nivel medio y superior, se observa que la situación mejora para la mujer ya que 24.4% de los hombres ganaba entre uno y dos salarios mínimos y, de las mujeres ocupadas, 28.4% estaba en ese intervalo de ingresos. A pesar de que la diferencia porcentual no es muy notable en estos casos, sí lo es en el caso de la tasa de participación en trabajo no remunerado de acuerdo con estadísticas del Instituto Nacional de las Mujeres, es decir, de aquellos trabajos que no ofrecen prestaciones laborales, pues en el caso de las mujeres representa 95.72%, en comparación con los hombres que es de 65.32%
Por último, cabe mencionar que la mayor participación laboral que han tenido las mujeres también está asociada con los cambios demográficos del país, como el hecho de que hoy en día tiene menos hijos, mayor nivel de estudios, una vida independiente y mejor prevención de embarazos. En este sentido, de acuerdo con la Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica 2018, en México residen casi 125 millones de mexicanos, de los cuales 51.1% son mujeres y 48.9% son hombres.
Es interesante ver que la tasa de fecundidad de la mujer paso de siete hijos por mujer en 1960 a dos hijos en 2018. También se observa una correlación entre nivel de estudios y número de hijos. Con nivel primaria representa 2.82 hijos y con estudios a nivel medio superior o superior baja a 1.75 hijos por mujer. Asociado también al nivel de escolaridad está el uso de los métodos anticonceptivos, ya que 1.7% de mujeres con escolaridad primaria usaba métodos anticonceptivos en 2018, a diferencia de las mujeres que estudian en el nivel medio superior, con un porcentaje de 26%. Finalmente, cabe destacar que el porcentaje de mujeres en unión libre aumentó de 20.4% en 2014 a 23.2% en 2018.