Mi historia con la UNAM comienza cuando ingresé a estudiar a la Facultad de Ciencias; luego continué mi formación estudiando la maestría en Ciencias de la Tierra con orientación en Riesgos por Fenómenos Naturales. Esto me llevó a trabajar en el Centro Nacional de Prevención de Desastres, como jefe del Departamento de Vulcanología en la Subdirección de Riesgos Volcánicos. Estuve en esta institución durante seis años, en los que apliqué todo lo que la UNAM me había enseñado.
Ingresé al doctorado en Ciencias de la Tierra, con orientación en Vulcanología. También me incorporé a la Facultad de Ciencias de la UNAM como profesor de asignatura de las materias de Ciencias de la Tierra y de Vulcanología. Recientemente me incorporé a la Escuela Nacional de Ciencias de la Tierra, también de la UNAM, como profesor de las asignaturas de Ciencias de la Tierra III y de Gestión Integral del Riesgo. Además soy docente en la maestría Latinoamericana de Gestión del Riesgo de la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua. Compartir con los estudiantes los conocimientos que he adquirido y mis experiencias es una de las actividades más gratificantes que he tenido.
Mi trabajo de doctorado trata sobre los efectos que podría tener una probable erupción al sur de la Ciudad de México. Para esto fue necesario desarrollar un modelo probabilístico para identificar zonas de mayor susceptibilidad. En estas zonas de más susceptibilidad llevé a cabo simulaciones numéricas de peligros volcánicos. Parte de estas simulaciones las hice durante una estancia de investigación que hice en la Universidad de Milán, en Italia. Esto fue posible gracias al apoyo del Posgrado en Ciencias de la Tierra y del Instituto de Geofísica de la UNAM, donde realicé mi doctorado. Al regresar de mi estancia en Milán y gracias al apoyo de la Asociación Latinoamericana de Vulcanología, hice un curso de especialización en la Evaluación y Manejo de los Riesgos Geológicos y Climáticos (CERG-C) en la Universidad de Ginebra, en Suiza.
Los resultados de mi investigación de doctorado fueron también integrados al Atlas de Riesgos de la Ciudad de México, que es una herramienta fundamental para la toma de decisiones de desarrollo de la ciudad. Gracias a mi investigación doctoral, tuve la fortuna de hacerme acreedor al Premio a la Excelencia Lomnitz-Castaños 2021 por la mejor tesis de doctorado, otorgado por la Fundación UNAM. Con esto pude ser testigo de la noble e importante labor que realiza la Fundación UNAM a través de sus programas, que han beneficiado a miles de estudiantes para realizar sus estudios universitarios y que han reconocido a aquellos destacados, con el fin de fomentar la excelencia académica.
Los conocimientos, habilidades y experiencias que me ha dado la UNAM me han permitido participar en diversos proyectos, la mayoría de ellos enfocados al análisis de los peligros y el riesgo volcánico. Participé en la actualización del Mapa de Peligros del Volcán Popocatépetl y he desarrollado algunas metodologías para la evaluación del riesgo volcánico. Actualmente participo, con otras investigadoras de la UNAM, en un proyecto de Asistencia Técnica Especializada para el Sistema de Alerta y Vigilancia ante Erupciones Volcánicas en Guatemala y difundido en Centroamérica, coordinado por el Centro de Geociencias de la UNAM y financiado por la Agencia Suiza para el Desarrollo y la Cooperación.
Poder colaborar en proyectos que permiten proteger y mejorar la calidad de vida de las personas, y ser testigo del prestigio de la UNAM más allá de las fronteras me llena de orgullo y satisfacción como universitario.