¿Javier Aguirre es responsable de la goleada ante Colombia? Por supuesto que sí. Pero antes pasaron Gerardo Martino, Diego Cocca y Jaime Lozano. Los entrenadores tienen culpa, pero el porcentaje es menor. Habrá cambiado el nombre de quien se sienta en la banca, pero los futbolistas (en su mayoría) son los mismos y quienes no han estado a la altura.
Hoy, el futbolista mexicano no está para competir en el alto nivel. Revisar los resultados contra selecciones serias en los últimos tres años resultaría ocioso, pero la triste realidad es que —contra cuadros competitivos— los nuestros se han quedado cortos. En Concacaf, volvimos a ser amos y señores, pero ser los reyes de esta paupérrima área y nada es lo mismo.
Lee también La Selección de Ecuador es la verdadera prueba para los delanteros de México por este motivo
Cuando la Selección Azteca se enfrenta a rivales de cierta jerarquía, las carencias de los nuestros se exhiben. Los adversarios juegan a otra velocidad, y no me refiero a la rapidez con la que corren nada más, sino a la celeridad con que ejecutan cada acción de juego. Los colombianos (el sábado) y antes los suizos, por ejemplo, parecían aviones y los mexicanos carretas.
El sistema que rodea al balompié azteca ha fomentado la mediocridad. Lo que daríamos hoy por tener a elementos como Carlos Salcido, Pável Pardo, Salvador Carmona, Manuel Negrete, Claudio Suárez, Andrés Guardado, Alberto García Aspe o Carlos Hermosillo. Tuve la decencia de no mencionar a los fuera de serie, como Hugo, Rafa y Cuau.
Fuimos para atrás. Competir en Sudamérica ayudó para que el jugador mexicano adquiriera otro roce. Hace no tanto, había compatriotas nuestros en buenos equipos europeos. Hoy, salvo Raúl Jiménez, Johan Vásquez y Santiago Giménez, el resto de nuestros europeos participa en Ligas de segundo orden (hoy me desperté positivo).
Tras la participación de la Sub-20 en el Mundial, hay quienes piden a varios de esos jugadores como solución para la Mayor. ¿Tienen condiciones y un buen futuro por delante? Sí. Pero si ya estuvieran listos para ser los salvadores de la Selección Mayor, no habrían caído contra Argentina. Un representativo juvenil con cinco elementos listos para brillar en el mayor (del nivel de México para arriba), habría desfilado al título sin sufrir.
Gilberto Mora parece ser el indicado. El distinto. Es el muchacho, como alguna vez lo fue Giovani dos Santos, que puede integrar el grupo de los fuera de serie mexicanos. La cosa es que el momento del equipo no parece el propicio para que alguien florezca. Ojalá, pronto, los directivos entiendan que estamos mal, vamos mal y que ni Mora, ni la FIFA, nos van a salvar en 2026.
futbol@eluniversal.com.mx