El oficialismo es víctima de su propia negligencia, incapacidad y falsedad. No hay día que pase en el que no se demuestre que este gobierno es un fracaso brutal y que en tan solo cinco años ha asestado el mayor retroceso en grandes conquistas sociales como el derecho a la salud, educación, alimentación, vivienda, agua, desarrollo social, igualdad y seguridad.
Por más derroche que haga del erario, a Morena no le alcanza para pretender comprar el voto de la sociedad mexicana, la cual sabe que en 2018 fue engañada y que desde entonces ha sido ignorada, maltratada y estafada.
Hablan del amor al pueblo mientras éste sufre las consecuencias de sus raterías. ¿Qué amor puede haber cuando toleran que miles de personas se queden cada día sin medicamentos para sanar? ¿Qué amor puede haber cuando dejan que el crimen actúe a sus anchas, secuestrando, matando y extorsionando a la gente? ¿Qué amor puede haber cuando los gobernantes no asumen su función de autoridad y rehúyen cualquier responsabilidad? ¿Qué amor puede haber cuando callan frente a la ineptitud del demagogo y son cómplices de sus ocurrencias en detrimento del bien público? ¿Qué amor puede haber cuando han acabado con los recursos naturales de la Península de Yucatán y despojado a miles de pobladores mayas? Ninguno.
El único amor que Morena conoce es por el dinero público y su saqueo.
Por ello la opción visionaria, estratégica, sensible y responsable que representa Xóchitl Gálvez Ruíz y las candidaturas legislativas han logrado dar la batalla a la aplanadora morenista y junto con PRI, PAN y PRD han avanzado en la ardua tarea de dialogar con la sociedad para demostrar que sí hay de otra, que sí hay opción y que sí es posible vencer las marrullerías del oficialismo.
Con capacidad, talento y auténtica vocación de servicio, Xóchitl Gálvez se ha colocado en la preferencia ciudadana y logrado acotar enormemente esa diferencia que el oficialísimo decía que era inalcanzable.
Lo único que ha hecho la candidatura oficialista es caer en las preferencias y demostrar que hablan del pueblo solo para esconder su desapego, indiferencia y falta de propuesta.
Faltan 64 días para que la sociedad bote a Morena y elija a quien será la primera Presidenta de México: Xóchitl Gálvez Ruiz, fortalecida con la mayoría legislativa del auténtico y legítimo Amor por México.
No hay duda de ello. ¡Trabajemos con mayor fuerza y ahínco para lograrlo!