El Senado de la República ratificó el nombramiento con el que me ha distinguido la Presidenta Claudia Sheinbaum para encabezar la Misión Permanente de nuestro país ante la OEA, lo que considero un honor y una alta responsabilidad, en la que empeñaré mi mayor esfuerzo, velando por la soberanía e integridad de nuestra Nación.
La OEA es considerada como el máximo foro político de diálogo de las Américas que, en el momento actual, en que se han debilitado el multilateralismo, la cooperación y la solidaridad internacional pueden desempeñar un papel central en las relaciones entre los Estados de nuestra región.
México continuará abogando para que la Organización actúe bajos los principios de igualdad jurídica entre los Estados, la no injerencia en los asuntos internos de los Estados y la autodeterminación de los pueblos, para afianzar la paz, la seguridad y la consolidación de la democracia en el continente.
La Misión continuará promoviendo los valores del multilateralismo sustentado en los pilares originarios de la Organización: democracia; derechos humanos; seguridad, y desarrollo.
Continuará impulsando que la Secretaría General actúe de manera imparcial, generando puentes de entendimiento entre los países del hemisferio, a fin de evitar posturas parciales o intereses particulares que provocan distanciamiento entre la Secretaría General y los países miembros.
Retomará la política exterior de la Presidenta Sheinbaum para el desarrollo de estándares internacionales, en materia de derechos humanos, personas en situación de pobreza, migrantes, mujeres, infancias, personas y pueblos indígenas y afrodescendientes, personas con discapacidad, personas mayores, personas LGTBIQ+. promoviendo la igualdad sustantiva en todas las acciones de la Organización para garantizar una vida libre de violencia e igualdad sustantiva.
Seguirá impulsando una definición actualizada de Seguridad Multidimensional, que incluya además de las amenazas tradicionales, los nuevos desafíos a la seguridad de los Estados del hemisferio: el combate a la delincuencia organizada trasnacional, el tráfico de armas, drogas y de personas, el terrorismo, el combate a la pobreza, y la gestión integral de riesgos de desastres.
En cuanto a las Misiones de Observación Electoral, nuestro país continuará defendiendo que éstas actúen bajo los principios de racionalidad, transparencia, austeridad y rendición de cuentas, apegándose a su carácter técnico, ya que éstas no cuentan con la facultad para emitir juicios de valor sobre la forma en que los países, en uso de su soberanía, conforman su sistema político o su poder judicial.
México continuará impulsando las iniciativas que surjan en el seno de la OEA respecto a Haití, para apoyar una transición haitiana hacia la estabilidad, la gobernabilidad democrática y el desarrollo, con liderazgo nacional. De la misma manera continuará respaldando la Misión de Apoyo al Proceso de Paz en Colombia, en su calidad de país garante en los Diálogos de Paz entre el gobierno colombiano y el Ejército de Liberación Nacional.
En resumen, la representación de México buscará promover que el organismo recupere su institucionalidad e imparcialidad respecto a eventos que ocurren entre los países miembros; apuntalar un multilateralismo que fortalezca los espacios de concertación y cooperación. Un multilateralismo que promueva la democracia y una cultura de diálogo y paz entre las naciones, que combata la desigualdad bajo el principio de igualdad y no discriminación, para “que nadie se quede atrás, nadie se quede afuera”.
Embajador de México ante la OEA