Un día como hoy de hace 78 años nació Jaime Humberto Hermosillo, el hombre que nos enseñó a mirar el México contemporáneo a través de un cine que se atrevió a ver más allá. Nunca como ahora es actual el cine de Jaime Humberto Hermosillo. Cineasta extravagante y disruptivo; enfrentaba a su público a las preguntas que se hacían cada una de sus historias: ¿Una mujer de una ciudad pequeña podía experimentar su sexualidad al punto de incendiar lo que le rodeaba? Eso ocurrió en La pasión según Berenice. ¿Se puede concebir un romance desaforado entre un ladrón de casas y una mujer con problemas mentales? Lo vimos en María de mi corazón. ¿Una respetable ama de casa solaparía los encuentros homosexuales de su hijo? De eso trató Doña Herlinda y su hijo. ¿Harías una película sobre dos amantes, sin cortes, hasta rozar la pornografía? Y ahí está La tarea.
Lo asombroso del cine de Hermosillo es que Berenice, María, doña Herlinda y los videoastas de La tarea, personajes extravagantes en su momento, ahora son mujeres y hombres que ejercen con total libertad su gozo y sus identidades, que podríamos encontrar en festivales de cine LGBTTTI, en documentales que tratan de la inclusión, en las pláticas que tenemos entre amigos, donde las anteriores audacias ahora son legítima diversidad.
Y ahí hay que recordar que para él no eran nuevos los esquemas de producción independientes: María de mi corazón, que proyectamos hace poco en la Cineteca Nacional, con la presencia del propio Jaime Humberto, María Rojo y Héctor Bonilla, fue de las primeras películas mexicanas que se produjeron desde una cooperativa, lo que habla de la perseverancia de Hermosillo por crear películas que escaparan de las formas de creación y producción tradicionales.
Hoy, 22 de enero, Jaime Humberto Hermosillo cumpliría 78 años, y la Secretaría de Cultura, a través de la Cineteca Nacional y el IMCINE, va a celebrarlo a las 19:30 horas en la Sala 9 de la que también fue su casa, junto a Arturo y toda su gente querida, con su público fiel, y compartiendo una vez más una de sus mejores obras: La pasión según Berenice.
Jaime Humberto Hermosillo nos deja su cine y nos deja su mirada. En estos días, el cine mexicano también despide con dolor a Juan Tovar y a Ángel Goded. Estamos profundamente agradecidos por su legado.
En cualquier lugar donde haya alguien haciendo cine mexicano, donde ahora filman las comunidades indígenas, donde descubren nuevos recursos los estudiantes de cine, donde intentan la aventura las pequeñas cooperativas, en todos esos lugares está la mirada de Jaime Humberto proponiendo la libertad, la independencia y la diversidad que supo contar en sus propias historias.
Secretaria de Cultura