Aunque las secretarías de seguridad han pasado de ser encabezadas por civiles o policías a ser de mandos militares, las tasas de homicidio y violencia han aumentado, de acuerdo con el informe La otra militarización: Fuerzas Armadas al frente de instituciones estatales de seguridad pública en México, 2011- 2024, de México Evalúa.
El documento indica que aunque hay mayor presencia militar en las corporaciones policiales de las 32 entidades, la violencia no cesa, las muertes de hombres y mujeres se incrementaron y han causado inestabilidad en dichos organismos.
Según el análisis de la ONG, durante los sexenios de Enrique Peña Nieto y Andrés Manuel López Obrador los mandos de las secretarías locales de seguridad han permanecido, en promedio, únicamente dos años en el cargo, hecho que ha derivado que en 20 entidades del país haya constante rotación de titulares con hasta siete personas distintas.
Este hecho derivó que se interrumpiera la estabilidad de las decisiones en materia de seguridad, la retroalimentación del uso de violencia y la sacudida de mercados de criminales.
La otra militarización puntualiza que durante los últimos 12 años, a la par del aumento de la violencia en el país, se incrementó el número de secretarios de seguridad pertenecientes a las Fuerzas Armadas, pese a los casos graves de violaciones a los derechos humanos en los que elementos castrenses han estado implicados.
El informe reveló que en los últimos seis años, la administración de Morena delegó 56% de las secretarías estatales de seguridad a mandos de la Secretaría de Marina (Semar); 21% a mandos civiles; 15% a líderes militares y 8% a policías de carrera.
Mientras que el partido tricolor nombró a 46% de militares como titulares locales de seguridad; a otro 46% de policías de carrera; además de 33% de mandos civiles y 26% son perfiles provenientes de la Semar.