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Convertirse en ingeniero mecánico es la principal meta de Javier Pérez Sandoval. Después de 10 años de haber abandonado la escuela, el joven de 24 años no pierde el entusiasmo por regresar a un salón de clases y continuar con sus estudios.
Javier comenta que la principal dificultad para conseguir empleo es la falta de estudios y su discapacidad. La agenesia que padece hizo que los dedos de su mano izquierda no se desarrollaran, no obstante, no es una limitante para él.
“La gente piensa que no podemos hacer las cosas por tener una discapacidad y que por eso nos deben dar tareas pequeñas, que no vamos a rendir igual, por eso las empresas quieren pagarnos menos. Eso no es cierto, nunca he tenido ninguna complicación”, dice.
Los problemas económicos llevaron a Javier a dejar la secundaria para buscar un trabajo. Durante este tiempo ha adquirido experiencia como chofer y actualmente trabaja como repartidor en una fábrica del Estado de México. Detalla que puede conducir desde una motocicleta hasta un camión.
En su trabajo actual maneja una moto y se desplaza a diferentes puntos de Ecatepec. Con orgullo afirma que puede conducir un camión de tres y media toneladas.
Javier es uno de los 65 mil jóvenes que ha sido vinculado a una de las 80 mil empresas que forman parte del Programa Jóvenes Construyendo el Futuro. Hasta el 27 de febrero pasado, la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) reportaba estas cifras, así como la de un millón de preinscritos.
Javier comenta que desde diciembre escuchó sobre esta iniciativa, por lo que en enero realizó el prerregistro y, una vez completado el trámite, lo contactó la dependencia para informarle que le habían conseguido empleo.
“Me queda cerca de mi trabajo y me siento muy a gusto. Mi tutor es muy bueno, me orienta mucho y me motiva. La beca es un apoyo para los gastos de mi casa”, afirma.
El joven es casado y vive con su esposa, quien trabaja como auxiliar administrativa. Durante el año que durará en el programa, planea concluir la secundaria y la preparatoria para así intentar ingresar al IPN y estudiar Ingeniería Mecánica.
Jóvenes Construyendo el Futuro prevé atender a 2.3 millones de personas de entre 18 y 29 años que no han tenido la oportunidad para trabajar o estudiar y que buscan una primera experiencia laboral.
Los jóvenes obtendrán, además de la capacitación, el pago de 3 mil 600 pesos mensuales hasta por un año, siempre y cuando acudan al centro de capacitación que ellos mismos eligieron de acuerdo con sus preferencias, así como el acceso al servicio de salud a través del IMSS. Durante este año el programa ejercerá un presupuesto de 40 mil millones de pesos.
