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Este platillo prehispánico , el de mayor historia en la gastronomía nacional, se tiene rastreado que ya era consumido en la gran Tenochtitlán, entre los años 1325 y 1521 .
Era preparado principalmente con carne humana, aunque también con carne de xoloitzcuintle o carne de pavo . Sin embargo, el verdadero origen de este platillo es ritual y religioso, en entrevista con EL UNIVERSAL, Enrique Ortiz García, divulgador de la historia de México.
Quien encabeza el proyecto de difusión cultural Tlatoani Cuauhtemoc @Cuauhtemoc_1521 en Twitter nos cuenta que este guiso ahora tan popular no lo era tanto en la época mexica, ya que se consumía durante las ceremonias nahuas a Xipe Totéc: Nuestro Señor el Desollado.
“A las personas durante este festejo se les desollaba, se les quitaba la piel, es el mismo proceso cuando a una mazorca se le quita la piel para ser consumida” narra Ortiz García.
La carne utilizada era principalmente de guerreros capturados en combate o de esclavos no mexicas, “se les sacrificaba a estas personas, algunos en un sacrificio gladiatorio” y “el muslo derecho siempre iba al palacio del Huey Tlahtoani, para expresar agradecimiento y respeto”, explica Enrique Ortiz.
En tiempos prehispánicos el pozole era conocido como tlacatlaolli que significa “maíz desgranado de hombres” y era un privilegio para un grupo muy selecto de la gran Tenochtitlán, únicamente era consumido por nobles, gobernantes y guerreros combatientes.
A pesar de no tener el dato exacto sobre cuando este exclusivo manjar pasó a la mesa de la población en general, fue durante la época colonial, cuando los españoles prohibieron los rituales a los dioses mexicas y se sustituyó la carne humana por la de cerdo, que en textura es similar.
El divulgador de la historia de México, resalta que contrario a lo que algunas líneas de investigación señalan sobre el consumo de carne humana en la cultura mexica, no era por falta de proteína en la dieta de nuestros ancestros, “los mexicas tenían una dieta más variada de la que nosotros actualmente tenemos, ellos consumían insectos, larvas, garzas, patos, ajolotes, venado, una gama mucho más diversa de la que actualmente tenemos, lo hacían con fines rituales” finalizó.