Un tumor en la parte baja de la columna vertebral llevó a Jaciel, de apenas 10 años de edad, al quirófano del Hospital Infantil de México Federico Gómez , la operación se realizó el 19 de septiembre , el sismo de 7.1 grados que se registró ese día no impidió que el procedimiento se llevara a cabo .
El tumor le generaba a Jaciel dificultad en los movimientos y dolor en la espalda, la cirugía para extirparlo duró ocho horas.
Para detectar el tumor, los especialistas del hospital realizaron varios estudios hasta que encontraron el tumor dentro del canal raquídeo que abarcaba casi una cuarta parte de la espina dorsal, por lo cual comprimía raíces nerviosas y la médula espinal, describió su médico, el neurocirujano pediátrico Luis Felipe Gordillo Domínguez.
Se trataba de una patología rara: un tumor epidermoide de lenta evolución. Pero para evitar más complicaciones en la salud del pequeño, programaron su cirugía tres días después de su ingreso.
La operación concluyó exitosamente ocho horas más tarde.
Actualmente Jaciel se recupera en su casa y en los próximos cuatro meses, su columna se reconstituirá poco a poco. " Esto es solo el inicio de un largo camino de rehabilitación", dijo el neurocirujano.
Gordillo Dominguez recordó el momento en el que se sintió el sismo de 7.1 grados mientras operaban a Jaciel.
“En el momento del terremoto, teníamos unos minutos de haber levantado la columna lumbar del pequeño. Estábamos liberando el tumor pegado a las raíces nerviosas, cuando el microscopio quirúrgico se sacudió violentamente. Nos dimos cuenta de que empezaba a temblar y cubrimos al niño con unas compresas para evitar que se contaminara la herida. Lo mismo hizo una de las enfermeras con el material quirúrgico”.
Su equipo integrado por ocho personas, dos de ellas especialistas en neurocirugía, permaneció quieto y tranquilo. Esperaban que el movimiento telúrico fuera breve, pero no fue así. Todo se seguía cimbrado a su alrededor.
“¿Qué me preocupó en ese momento? Es una situación muy, muy compleja. De entrada, uno tiene sus cinco sentidos puestos en la cirugía. Nosotros no sabíamos que el terremoto iba a tardar 90 segundos ni la magnitud de su movimiento”, comentó.
El nerocirujano ecordó las recomendaciones de Protección Civil, donde se les sugiere concentrarse en lugares seguros, conocidos como el triángulo de la vida. En el caso del quirófano: la mesa de operaciones, y así lo hicieron.
El sismo pasó. De inmediato, se verificó que Jaciel estuviera estable y que las máquinas que le daban soporte vital estuvieran trabajando adecuadamente.
Gordillo Dominguez miró a sus compañeros neurocirujanos Jonathan Franco y Natalia Hernández, y después de unos minutos, continuaron trabajando por cerca de dos horas y media más con la zozobra de que se presentara un segundo temblor.
“Sí, pudimos dar por terminada la cirugía y cerrar, pero cada uno de los integrantes del equipo mostró su profesionalismo, porque a pesar de que estábamos preocupados por nuestras familias, nos concentramos en hacer nuestro trabajo para retirar los remanentes del tumor que pudieran estar en la columna de este pequeño”.
Ahora, el doctor Luis Felipe Gordillo espera que Jaciel tenga una nueva oportunidad de vida feliz y sin dolor.
El neurocirujano detalló el procedimiento y reconoció al equipo de residentes altamente especializados, así como tecnología sofisticada con la que cuenta el Hospital Infantil para realizar cirugías de esta envergadura.
Hace 15 años, el doctor Gordillo Domínguez ingresó al servicio de Neurocirugía pediátrica, donde realizan en promedio entre 400 a 600 intervenciones anuales. De ellas la mitad son patologías tumorales intracraneales o medulares.
Desde hace casi cinco años se equipó el Servicio de Neurocirugía con tecnología para monitorear cada raíz nerviosa y el movimiento de los músculos durante una cirugía.