Tijuana, BC.— Por la inseguridad, de la que ya fueron víctimas, permanecer en México no es una opción para migrantes nacionales y de otros países que se quedaron sin cita en la aplicación CBP One o que fueron deportados en el primer día de mandato de Donald Trump como presidente de Estados Unidos.
“Venimos huyendo amenazados de muerte por un grupo de narcos en Chiapas que nos corrió de nuestra casa. Mi hijo y mi esposo no pueden regresar ni a la Ciudad de México. Si regresamos nos van a matar, necesitamos una oportunidad en otro país”, dijo Rosa Pérez a EL UNIVERSAL.
Rosa viajó desde el año pasado a la zona fronteriza del país junto a sus cuatro hijos, tres mujeres y un hombre adolescentes, más su esposo y dos vecinos, quienes son pareja y también fueron desplazados por bandas delictivas.
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El programa México Te Abraza no solucionará las causas de fondo que hicieron a miles de mexicanos abandonar estados como Zacatecas, Guerrero, Oaxaca, Jalisco, Michoacán y Chiapas, agregó.
Así lo aseguró la mujer, pues no es la única desplazada por la violencia en su estado, ya que con ella un camión de pasajeros repleto salió de Chiapas hace tres meses, hecho que, platicó, se repite día con día, pues los jóvenes son reclutados por el crimen organizado y las mujeres y hombres de mayor edad son obligados a pagar piso o cometer otros crímenes que son negocio de los cárteles.
Rosa Pérez y su familia salieron de su ciudad natal porque fueron víctimas de los grupos delictivos. Presuntas autoridades migratorias hicieron complicado su camino hacia el centro de México y después a la zona fronteriza, adonde arribaron hace un mes para buscar la oportunidad de conseguir una cita de gestión de entrada legal a Estados Unidos.
“Es un dolor muy grande, es una tristeza inmensa. No estamos seguros aquí. Nos van a matar si regresamos”, insistió la mujer, que desde octubre se informó sobre cómo solicitar refugio en Estados Unidos al no hallar garantías de seguridad en Chiapas.
Como ella, Norma, una mexicana originaria de Morelos, quien prefirió no dar más datos por seguridad, se niega a permanecer en el país en caso de que esa fuera la única opción que le quede.
Aunque ya sabía que su cita fue cancelada, Norma llegó por la mañana a la garita El Chaparral con la esperanza de que las autoridades ofrezcan alternativas a quienes perdieron su turno después del cierre de la aplicación, ya que no puede regresar a su municipio, pues su marido la golpea y quiere quitarle la custodia de sus hijos.
Norma interpuso una denuncia en la fiscalía local, misma que, acusó, le dio carpetazo. Además, su expareja la buscó en la Ciudad de México para amenazarla de muerte cuando se instaló ahí.
Viaja con una niña y un niño de seis y siete años. Estaba en el camión rumbo a Tijuana cuando intentó entrar a la aplicación, pero fue en vano. Hoy pide que Estados Unidos le otorgue asilo humanitario porque su vida está en peligro.
Por otro lado, Rosaura, originaria de Zacatecas, intentó cruzar a Estados Unidos a través de la gestión legal de trámites en CBP One para ayudar a su hijo, quien tiene discapacidad motriz que lo mantendrá postrado en una silla de ruedas de por vida a consecuencia de un delito, explica.
“Tenemos tristeza. No tengo palabras porque venía con la esperanza de que nos iban a dar el refugio que venimos buscando por la delincuencia, por lo que hemos pasado. Intentaron matar a mi familia, secuestraron a mi vecino, hirieron a mi hijo y con esta cancelación quedamos a disposición de la delincuencia, que desgraciadamente el gobierno sólo dice que no puede hacer nada por nosotros”, dijo en llanto a EL UNIVERSAL.
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El correo que le notificó que se cancelaba su cita llegó durante el discurso inaugural de Trump. La mujer aseguró que en ese momento rompió en llanto, junto a su esposo, por la impotencia de saber que no podría huir de México.
Rosaura no quiere quedarse. No sabe qué hacer. Además de las diferentes denuncias que ha interpuesto por las agresiones a sus hijos, ha intentado cambiar de teléfono y de dirección, pero los grupos criminales los encontraron.
“No sabemos qué vamos a hacer porque Tijuana está igual de inseguro. Ojalá que revisen caso por caso para saber por qué las familias están huyendo de su país y con las pruebas en mano lo decidan. No nos queremos quedar en México”, enfatizó.
En contraste, Kevin Roa, originario de Hidalgo, quien también escapó de su estado por la violencia, considera que el programa México Te Abraza sí es una alternativa que tomaría junto a sus hermanos, de 27 y 28 años, con quienes planeaba cruzar a Estados Unidos.
“En Hidalgo hay mucha violencia y poco trabajo. Por el crimen organizado hemos recibido varias amenazas. También suele haber muchos robos, asaltos a mano armada”, expone.