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Trámites tardados, corrupción e impunidad son el factor por el que las víctimas de algún delito no denuncian ante las autoridades. Indican que a pesar de que los delincuentes son detenidos, en cuestión de horas salen libres debido a que los ilícitos no ameritan prisión.
Daniel y su amiga caminaban sobre avenida Cuauhtémoc, en la colonia Roma, y a la altura de la calle Antonio M. Anza observaron que unos hombres los iban siguiendo a bordo de un taxi y no pudieron pedir auxilio, puesto que los sujetos inmediatamente salieron del vehículo.
Los hombres se acercaron a ellos, los encañonaron y les exigieron que entregaran sus pertenencias. Daniel pudo darse cuenta de que una de las armas era de juguete, pero no se arriesgó y entregó su celular nuevo, cartera y otros objetos de valor, su amiga también dio lo que tenía.
El coraje hizo que Daniel reaccionara después de que los hombres se llevaron sus pertenencias, tomó un taxi y le pidió que los persiguiera, sabía que una de las armas no era real, pero tras varios minutos de persecución perdió el rumbo de sus agresores y decidió regresar a su hogar.
“Llegué a casa y lo primero que hice fue bloquear mi tarjeta, pero al siguiente día verifiqué que me habían sacado como 4 mil pesos”, contó.
La acción no fue investigada por las autoridades debido a que Daniel no acudió a realizar una denuncia. Aseguró que lo único que pensaba era en cancelar tarjetas y en el tiempo que le generaría el trámite de documentos; además de que hacer una denuncia tarda más de un día.
Por unas monedas. Manuel no confía en las autoridades y menos cuando en ocasiones ha tenido que pagar dinero para que los agentes cumplan con su deber. Hace unas semanas fue asaltado a mano armada en la colonia Campestre Aragón, en la delegación Gustavo A. Madero.
Cerca de las 22:00 horas llegó a la casa de su novia a bordo de su vehículo, no se percató de la presencia; sin embargo, al momento de que su novia salió de su casa, dos jóvenes lo interceptaron y a punta de pistola le exigieron las llaves de la unidad.
“Uno me apunta con un arma y me pide las llaves del auto, el otro trata de subirse al carro, pero traía en la bolsa del pantalón las llaves y era difícil sacarlas, por lo que uno se enoja y empuja a mi novia, le dije: ‘Tranquilo, llévate el auto’, mientras trataba de proteger a mi pareja”, recordó.
Los sujetos tomaron las llaves, se subieron al vehículo, cerraron la puerta y en segundos se dieron a la fuga, en ese momento varios vecinos salieron a auxiliarlos y tocaron el botón de emergencia. Los policías arribaron y tras pedir para el refresco y recibir recursos, reportaron el coche a la central y lo ubicaron en 20 minutos.
“No podemos confiar en nadie, siempre es lo mismo con las autoridades, si no es con dinero no hacen nada, obviamente no denuncié, no iban a hacer nada y ahora como salen de inmediato, parece que uno pide limosna cuando va a denunciar, te hacen el feo y nunca te creen, las autoridades no son confiables”, puntualizó Manuel.
