Rafael Caro Quintero, Florence Cassez, Rubén Oseguera González “El Menchito”
y Juan José Farías Álvarez “El Abuelo” tienen en común que recuperaron su libertad por fallas en el proceso cometidas por las autoridades.
El último caso fue el de Juan José Farías Álvarez “El Abuelo” a quien este miércoles un juez de control en el Estado de México dejó en libertad debido a que los elementos de la Marina que lo detuvieron falsearon información en el reporte de su captura, por lo que la misma fue calificada de ilegal.
El caso más conocido por errores que derivaron en violaciones al debido proceso fue el de la francesa Florence Cassez quien en el año 2013 fue liberada por la Suprema Corte de Justicia de la Nación porque fue exhibida por las autoridades en un montaje televisivo que supuestamente daba cuenta de su detención.
Otro caso que ha tenido relevancia internacional es el del narcotraficante Rafael Caro Quintero , identificado como uno de los fundadores del Cártel de Guadalajara, a quien por violaciones al debido proceso y falta de pruebas en su contra por el asesinato del agente estadounidense Enrique Camarena Salazar, logró la eliminación de cuatro de las acusaciones que pesaban en su contra.
Ello derivó en que se le dictó sentencia por 13 años pero mediante un juicio de amparo logró que el Segundo Tribunal Unitario en materia Penal considerara que sus sanciones ya habían sido compurgadas y ordenó su liberación inmediata.
Sin embargo, el asunto llegó a la Corte donde el ministro Arturo Zaldívar Lelo de Larrea revocó el amparo y ordenó que el capo termine el tiempo que le fue impuesto como sanción en la cárcel.
La resolución del ministro Zaldívar fue emitida demasiado tarde pues actualmente Caro Quintero es considerado prófugo de la justicia y ha sido incluido en la lista de los hombres más buscados de la DEA y del FBI.
Rubén Oseguera González “El Menchito”, hijo de Nemesio Oseguera Cervantes “El Mencho”,
líder del Cártel Jalisco Nueva Generación, logró ser liberado en dos ocasiones porque la Procuraduría General de la República no ha logrado sustentar bien sus acusaciones.
A finales de 2014 le fue concedida la libertad por falta de elementos en el juicio que enfrentaba por lavado de dinero.
En octubre de ese año fue liberado pero al mismo tiempo reaprehendido por formar parte del Cártel de Jalisco Nueva Generación.
Esta nueva acusación quedó sin efectos en julio de 2015 cuando un juez consideró que su detención fue ilegal.
El juez señaló que elementos de la Policía Federal irrumpieron ilícitamente a su casa para lograr su captura además de que no había pruebas suficientes en su contra.
En enero de 2016 un tribunal federal revocó uno de los autos de libertad concedido a su favor y le dictó orden de reaprehensión, razón por la que actualmente está en el penal federal de Miahuatlán, Oaxaca.