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pedrovillaycana@eluniversal.com.mx
Román Meyer Falcón, titular de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), señaló que la política de vivienda de los gobiernos anteriores no ha mostrado resultados en el abatimiento del rezago habitacional, y que por el contrario, se ha focalizado en aplicar recursos para la adquisición de vivienda por población asalariada y atendida por la seguridad social del Estado mexicano.
El secretario afirmó que, como resultado de esta política, se ha excluido a la población de menores ingresos sin mecanismos de protección social.
En este sentido, manifestó que el presupuesto 2019, a través del Programa de Vivienda Social, refleja “una reorientación en la política de vivienda del país, que implica una nueva visión de atención, que prioriza a los más vulnerables y a aquellas entidades con mayor rezago habitacional”.
Afirmó que el Programa de Vivienda Social, que será ejecutado por la Comisión Nacional de Vivienda (Conavi) en coordinación con Sedatu, busca garantizar el derecho a una vivienda adecuada, priorizando la atención a la población sin acceso a financiamiento o en condición vulnerable, en ámbitos urbanos y rurales.
Detalló que para la asignación del presupuesto para la vivienda se consideró a la población con ingresos menores a cinco unidades de medida actualizadas, mayor rezago habitacional, zonas afectadas por fenómenos físico-naturales, y población vulnerable en localidades con acceso limitado a servicios básicos.
“El Programa de Vivienda Social busca la participación y colaboración de nuevos actores interesados en garantizar el derecho a la vivienda. Preservará el cofinanciamiento para la adquisición de vivienda nueva, que existe con los organismos nacionales, estatales y municipales de vivienda”.
El secretario manifestó que para atender a las personas que no han sido tomadas en cuenta por la política de vivienda, se requiere la coordinación y participación de todos los actores involucrados, puesto que con ello “se podrá alcanzar el objetivo de que todas las familias mexicanas, sin distinción, puedan formar un patrimonio. Se invita a todos a trabajar coordinados por garantizar las condiciones para el acceso a una vivienda adecuada y en condiciones financieras accesibles”.