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El nominado a embajador de Estados Unidos en México, Ronald Johnson, calificó de “única” la relación bilateral y elogió el reforzamiento de las medidas contra los cárteles, aunque rechazó descartar la posibilidad de que su país emprenda medidas unilaterales contra los narcos en caso de que estén en peligro vidas de estadounidenses.
En su audiencia de confirmación ante el Comité de Relaciones Exteriores del Senado de Estados Unidos, Johnson, un exboina verde, exfuncionario de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) que en los años 80 estuvo destacado en El Salvador durante la Guerra Civil como asesor militar y que regresaría muchos años después como embajador del país centroamericano, afirmó que en el tema de los cárteles, “preferimos la colaboración con México”.
Destacó la relación de Estados Unidos con México como “única en su impacto directo en la seguridad y prosperidad del pueblo estadounidense” y aseguró que “hay mucho que celebrar en nuestra relación con México, que con frecuencia se pierde en la discusión sobre los retos”.
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Cuando se le preguntó si está de acuerdo en que Estados Unidos “no debe emprender ninguna acción militar contra los cárteles en territorio mexicano sin el conocimiento y consentimiento del gobierno mexicano”, respondió: “Creo que en cualquier decisión contra un cártel en México, nuestro primer deseo sería que se haga en colaboración con nuestros socios mexicanos”.
Aludió a que el presidente Donald Trump “toma muy en serio su responsabilidad de salvaguardar las vidas de los ciudadanos estadounidenses” y en ese sentido consideró que si esas vidas estuvieran en peligro, “creo que todas las opciones están sobre la mesa”.
Destacó la entrega de 29 narcos, encabezados por Rafael Caro Quintero. Esos delincuentes, añadió, “estaban involucrados en actividades que hacen daño a los estadounidenses y creo que hemos visto arrestos adicionales con base en la información que ya fue obtenida de ellos y creo que veremos más.
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“Hemos visto un reforzamiento de la seguridad contra los cárteles por parte de las autoridades mexicanas. Escuché que algunos integrantes de los cárteles se resisten a abandonar sus instalaciones. Esa es una buena noticia”, agregó.
La relación bilateral, indicó, “es de suma importancia y complejidad, con una profunda integración económica, así como desafíos fronterizos y de seguridad compartidos” e insistió en que México es un socio central y en que ninguno de los dos países puede resolver el problema de la migración ilegal solo, estoy convencido de que podemos encontrar soluciones que beneficien a ambos países”, reiteró.
“Más de 10% de los estadounidenses, 40 millones de personas, son de herencia mexicana. Nuestras culturas están cada vez más interconectadas y nuestras sociedades comparten el espíritu de optimismo y nuevo tipo de pensamiento que nos permite conectarnos y colaborar para atender desafíos compartidos”, dijo.
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El secretario estadounidense de Estado, Marco Rubio, reconoció en una entrevista con Fox News, en la que habló en español, la mayor cooperación mexicana: “Hemos visto un nivel de cooperación de parte de autoridades mexicanas que no se ha visto en el pasado, pero no es suficiente, tenemos que hacer más”.
Externó que “el gobierno de la presidenta [Claudia] Sheinbaum ha tomado medidas muy fuertes que nunca hemos visto en el pasado para hacer el combate contra los cárteles y la inmigración masiva ilegal hacia Estados Unidos que siempre cruza a través de México, aunque no todos son mexicanos; obviamente la mayoría son de otros lugares”.
Rubio lamentó que “gran parte del territorio mexicano es controlado por los cárteles”, pero elogió la entrega de narcos a Estados Unidos: “Es un paso muy positivo, pero sabemos también, nos han dicho esto directamente de México, que en muchos de estos casos lo que impide cooperar es que existen niveles de corrupción e influencia sobre el ramo jurídico del país”.
El secretario de Estado de la Unión Americana precisó que los cárteles de las drogas no sólo “representan una amenaza para Estados Unidos”, sino también para “el Estado mexicano”.
“Los mexicanos dicen que las armas que usan los cárteles vienen procedentes de Estados Unidos y estamos dispuestos a ayudarlos”, afirmó. Redacción
