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Con 33 diputados, el PT se convirtió ayer en la cuarta fuerza parlamentaria en la Cámara de Diputados, gracias a que cinco legisladores del PES y Morena “brincaron” a sus filas.
Con esa operación podría presidir la Mesa Directiva camaral en la recta final de la 64 Legislatura, pero sólo en caso de prosperar el ciclo legislativo de la reforma a la Ley Orgánica del Congreso de la Unión que propuso ayer Morena, pero que se quedó en suspenso.
La iniciativa de ley fue discutida casi cinco horas y media, con el respaldo de Morena, PT y PES, que se aprestaban a avalarla. Pero quedó trunca luego de que por la noche el presidente de la Mesa Directiva, Porfirio Muñoz Ledo, declarara un receso para continuar hoy, y de paso anunciara su renuncia a la presidencia de la Cámara, con lo que se perfila la cancelación de la enmienda.
Conforme a ésta, Morena presidiría la Cámara —en su calidad de grupo parlamentario con mayoría absoluta— año y medio, y el resto de la Legislatura se repartiría en tres semestres, en los que presidirán otras tres bancadas, en función de su fuerza: PAN, PRI y PT, este último ya que ahora tendría 6.6% de la Cámara, con sus 33 legisladores.
La bancada del partido Movimiento Ciudadano, que como el PT tenía 28 diputados, quedó en quinta fuerza camaral.
Los legisladores que dieron el “salto” al PT son los que hasta ayer por la mañana eran tres diputados de Morena: Luis Enrique Martínez Ventura, Armando Javier Zertuche y Nelly Maceda Carrera, y dos del PES: José Luis García Duque y Olga Liliana Elizondo Guerra, quien era coordinadora de los diputados hasta el anterior periodo de sesiones.
El intercambio de diputados no paró ahí, pues se formalizó el cambio de José Ricardo Gallardo y de Lilia Villafuerte al PVEM.
Durante la discusión de la reforma legal que no se concretó, el PT defendió su nuevo papel de cuarta fuerza legislativa, debido a que, aseguró el diputado Benjamín Robles, ganó 30 (en realidad 29) distritos de mayoría, mientras el PAN, sólo nueve.
Con el chapulineo de diputados, el PT tuvo el crecimiento más significativo, luego de que hace cuatro años, en 2015, estuvo a punto de perder el registro como partido político nacional, pues estuvo a punto de no alcanzar 3% de la votación nacional.
