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La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo aseguró que debe aclararse el caso de Martín Borrego, exfuncionario de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), por el presunto uso de las instalaciones del Museo Nacional de Arte (Munal) para un evento de carácter personal.
“No deben usarse espacios públicos para ninguna conmemoración, celebración o actividad. Evidentemente hay actividades de Relaciones Exteriores y de otras secretarías que tienen que ver con reuniones protocolarias que se realizan, pero no fiestas”, dijo.
La Mandataria indicó que debe aclararse el caso e hizo un llamado a todos los servidores públicos a comportarse adecuadamente. “Y entiendo o ya informará, la secretaria de Medio Ambiente [Alicia Bárcena] sobre este caso”, expresó la Presidenta en conferencia de prensa.
El pasado domingo, el periodista Claudio Ochoa Huerta escribió en EL UNIVERSAL La (no) boda fifí en el MUNAL, columna en la que reveló que el recinto cultural fue usado para festejar la boda de Martín Borrego Llorente, exjefe de oficina de la SRE con la excanciller Alicia Bárcena, con Ionut Valcu, funcionario de la embajada de Rumania en México.
Se trató de un coctel en el Salón de Recepciones del Munal, con motivo, se dijo, del 89 aniversario de las relaciones diplomáticas entre México y Rumania el pasado 4 de octubre. El lunes, la SRE informó que el Órgano Interno de Control de la dependencia inició una investigación sobre el uso indebido de espacios públicos.
La presidenta Sheinbaum Pardo recordó que al iniciar su administración, el 2 de octubre, un día después de haber tomado posesión, envió una carta a todos los servidores públicos en la que les pidió predicar con el ejemplo de un gobierno honesto y austero.
La Mandataria instruyó a su equipo a que difundiera la carta que ella misma leyó y que a la letra dice: “Nuestro horizonte será predicar con el ejemplo a través de un gobierno honesto, honrado y austero, pues servimos a la Patria y no debemos servirnos de ella”.
En su misiva, les recuerda a los servidores públicos que su comportamiento y desempeño debe ser evitar y condenar las malas prácticas, propias del régimen que hemos superado: sin influyentismo, sin nepotismo, sin corrupción ni impunidad.
“El presupuesto no es de los funcionarios, es dinero del pueblo que debe ser cuidado y bien invertido”.
Recordó que la sociedad espera de todos los servidores públicos “nuestro” mayor y mejor esfuerzo, así que potenciemos el servicio público demostrando que el gobierno de México se compone de mujeres y hombres responsables, honestos, que hacen su trabajo a favor de nuestra Patria y nuestro pueblo.
“Esto nos obliga a actuar bajo los principios de no robar, no mentir y no traicionar la confianza del pueblo”, destacó.
Para finalizar su misiva, la Presidenta advirtió: “Les recuerdo que, de no actuar con ética y honradez, y de no atender estas instrucciones, podrían incurrir en actos de corrupción y, por tanto, ser responsables de delitos sancionados por la ley”.
