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juan.arvizu@eluniversal.com.mx
El coordinador del PVEM en el Senado, Carlos Alberto Puente Salas, asegura que en dos Legislaturas, la 62 y la 63, a casi dos meses de concluir, “dejamos una vara muy alta al próximo Senado de la República”. Y esto, “lo logramos todos, a pesar de tantas diferencias”, señala.
A la crítica social sobre el desempeño de los legisladores, Puente Salas responde: “En una Legislatura se logró la transformación institucional que no se había logrado en 12 años anteriores, por lo menos”. Y sostiene que llegará el reconocimiento.
Entrevistado en la oficina que inicialmente lideró Jorge Emilio González Martínez, quien salió de licencia, Puente Salas dice que el Senado contribuyó a la transformación institucional de México.
En política los tiempos son claros
¿Se refiere al Pacto Por México?
—El Pacto por México surge por la voluntad política de un Jefe de Estado de anteponer su capital político para lograr una transformación institucional en la que derechas e izquierdas coincidían 12 años antes.
¿Después del primer tercio se acabó el Pacto por México?
—En política los tiempos son claros: Llegaron los tiempos de procesos electorales, en los cuales había que diferenciarse entre fuerzas políticas. Después de ese aparente rompimiento, muchos temas siguieron.
¿Quedan pendientes?
—Es difícil atender todo, la productividad que tuvo este Senado no tiene ningún precedente.
¿Difícil atender todo?
—Socialmente muchas veces se evalúa por el número de iniciativas presentadas y no por los resultados obtenidos. Quedan muchas iniciativas pendientes, pero se atendieron prácticamente todos los temas urgentes.
¿Eso explica la distancia entre los ciudadanos y los legisladores?
—Este Senado va a pasar a la historia por darnos un modelo de parlamento abierto. Recibió a todos, incluso algunas personas que sorprendió que hubieran ingresado a la sede.
¿Los señores de Michoacán?
—Sí, algunos grupos.
¿Hasta ellos se recibió?
—Creo que vinieron como un gremio, no como representantes de algún grupo delictivo. Aquí no se le ponía alto a nadie.
¿Algunos con un machete?
—Sí, también. Eso no se recuerda, o no se valora o no se conoce.
¿Les faltaron los fiscales y magistrados anticorrupción?
—Construimos un Sistema Nacional Anticorrupción con los ciudadanos. Tiene dientes y está operando. En efecto, faltan las designaciones.
¿Por qué no se arreglan?
—Estamos muy cerca de poderlo lograr, quitando el ingrediente de la elección, el 2 de julio se abre una oportunidad, y en el Verde estamos dispuestos a trabajar para designar fiscales general y anticorrupción.
¿Un periodo extraordinario?
—Creo que lo podemos lograr. Los coordinadores de las bancadas en la Cámara Alta hemos platicado la posibilidad de que pasada la elección avancemos en atender asignaturas importantes.
La sociedad organizada también los critica por esta falta...
—A lo mejor no están satisfechos del trabajo que hicimos, pero lo hicimos en equipo [con ellos].
¿Qué evaluación le merecen las dos Legislaturas?
—Por su trabajo, tenemos un México con posibilidad de ser potencia, le quitamos ataduras y puede competir en el concierto internacional. Le dejamos una vara muy alta al próximo Senado de la República.
¿Cómo fue la relación del PVEM con el PRI?
—Una relación profesional, responsable. Reconocemos el respeto del coordinador del PRI y la buena voluntad de construir a favor de México.
¿A la luz pública no se ve que hayan tenido fricciones?
—Ninguna. Diferencias de opinión, sí. Nos dábamos la oportunidad de escucharnos, disentir, a fin de tener la comprensión del tema.
¿Hubo línea de EPN?
—No es necesaria la línea cuando se trabajó un proyecto que empezamos muchos años antes y lo consolidamos aquí, a partir de 2012. Con el Presidente todo el respaldo incondicional hasta el último día de su mandato.