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La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) no cuenta con una normatividad que regule el depósito de escombros de los edificios que colapsaron tras el sismo del pasado 19 de septiembre.
A 10 días del temblor de 7.1, la Semarnat alista un convenio de colaboración con la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y los estados afectados para establecer los lineamientos del destino de los deshechos provocados por el movimiento telúrico.
El acuerdo será suscrito por la Ciudad de México, Estado de México, Morelos y Puebla, para definir los lineamientos para la disposición final de los escombros retirados de los edificios colapsados.
EL UNIVERSAL documentó que el tiradero del Bordo es el destino de toneladas de escombros producidos por el sismo pedazos de ropa, libros, muebles destrozados, mochilas, colchones, todo quedó mezclado el basurero que hiede a podrido y se extiende por varios kilómetros.
Además han sido depositados colchones mojados por las lluvias, material para coser, maletines llenos de lodo, zapatillas y botas de mujeres; trabajadores señalaron que se observaron camiones que descargaron el cascajo de los escombros.
Este tipo de basura, proviene de actividades de construcción por lo que es definida por la Semarnat como "residuos de manejo especial", cuyo manejo y disposición final son competencia de los gobiernos locales ante las afectaciones de este sismo se llevará a cabo un convenio de colaboración para evitar que los desperdicios sean tirados a cielo abierto, lo que causaría contaminación y afectaciones al medio ambiente.
Debido a que los escombros generados por los temblores se tratan de una situación extraordinaria, están trabajando en este marco de cooperación entre las entidades para darles un manejo adecuado a estos deshechos. La Profepa vigilará el cumplimiento de los lineamientos.
