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francisco.resendiz@eluniversal.com.mx
Al advertir que siempre gobernó pensando en las futuras generaciones, respetando las libertades, convencido de que en México no hay lugar para imposiciones y menos para visiones únicas, el presidente Enrique Peña Nieto se despidió de los mexicanos.
En la víspera de concluir su mandato, a través de un video difundido en sus redes sociales, Peña Nieto dijo que ahora tendrá el privilegio de todo ciudadano “de contribuir al bienestar de nuestra sociedad desde el ámbito privado”.
Sentenció: “Las responsabilidades son pasajeras, el amor de nuestro país es permanente. Como un miembro más de esta gran comunidad que somos, seguiré siempre al servicio de México”.
El mandatario —quien está en Argentina en el marco de la Cumbre del G20, y donde atestiguará la firma del Tratado Comercial México, Estados Unidos, Canadá (T-MEC)— dijo que fue respetuoso de los poderes Legislativo y Judicial, de los gobiernos estatales, municipales y de los organismos autónomos, lo mismo que con la sociedad civil, la académica y el sector privado.
“Respeté en todo momento la libertad de expresión y el derecho a criticar y disentir, convencido de que en México no hay lugar para imposiciones y menos para visiones únicas”, afirmó y luego subrayó que la diversidad de nuestro país no debe significar división.
“Todos deseamos hacer de México un país en paz, con una sociedad preparada y más próspera, una nación soberana que actúa con responsabilidad ante la comunidad internacional. En una sociedad diversa y democrática como la nuestra es legítimo proponer vías distintas para alcanzar los fines que compartimos”.
