El alto número de contagios por coronavirus puso en vilo el periodo ordinario de sesiones del Senado —del 1 de febrero al 30 de abril próximos—, y de inmediato quedó cancelado el proyecto de la Comisión Permanente del Congreso, sobre convocar a jornada extraordinaria el viernes 15.
Vía digital, los presidentes de las Juntas de Coordinación Política (Jucopo) del Senado, Ricardo Monreal Ávila, y de la Cámara de Diputados, Ignacio Mier Velazco, anunciaron la decisión de no solicitar que sus plenos sesionen de manera extraordinaria.
Monreal Ávila recordó que la tarea legislativa es actividad esencial en la pandemia, aunque también consideró que la Cámara Alta debe cumplir sus funciones con cuidado preventivo.
Las decisiones de la forma en que podrá operar el Senado serán tomadas en la Jucopo al inicio del periodo ordinario, con base en las disposiciones sanitarias de las autoridades para la población en general, dijo Monreal Ávila.
Por mandato constitucional, agregó, el lunes 1 de febrero se llevará a cabo la sesión del Congreso General, en la que se declaran instaladas las Cámaras de Diputados y Senadores, tras lo cual en la Alta se tomarán los acuerdos sobre el trabajo legislativo.
El diputado Ignacio Mier Velazco señaló que la agenda prevista para el periodo extraordinario del 15 de enero será tratada en la primera sesión del periodo ordinario, “consecuentes con la responsabilidad pública que representamos”.
Para el periodo extraordinario se había programado en el Senado votar la Ley Orgánica de la Fiscalía General de la República, y en San Lázaro aprobar Ley General de Educación Superior y, eventualmente, reformas a la Ley del Banco de México (Banxico) en materia de captación de divisas.
Las dependencias del gobierno federal permanecerán cerradas y, por disposición de la Secretaría de la Función Pública (SFP), sus servidores públicos podrán realizar tareas laborales a distancia hasta el 30 de abril.
Monreal Ávila dijo que se deben evitar los contagios en todo el personal del Senado e hizo votos porque “salgamos de la pesadilla sanitaria”. Señaló que en el periodo ordinario se desahogará la materia de la Ley Orgánica de la FGR, la Ley de Remuneraciones de los Servidores Públicos; se concluirá la Ley de Educación Superior, la reforma a outsourcing, la legalización de la marihuana, la de Economía Circular y la del Banxico.
También tendrá curso la ratificación del nombramiento del embajador de México en Estados Unidos, Esteban Moctezuma Barragán, así como de comisionados del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) y magistrados agrarios, enunció Monreal en un mensaje en video que difundió en sus redes sociales.
Expresó que “muy pronto saldremos de esto” y consideró ejemplar la campaña de vacunación; remarcó: “Continuaremos profundizando los cambios que merece nuestro país”.
El país vive el nivel más alto de contagios por Covid-19 desde que se declaró la emergencia sanitaria el 31 de marzo pasado, y esta vez se llega sin que las dos Cámaras hubieran consensuado una reforma para poder legislar a distancia. Con base en un acuerdo político, las ocho bancadas concurren en sesiones a distancia, así como en reuniones de comisiones, y su capacidad se detiene en la votación de dictámenes de leyes, reformas y decretos, lo cual exige que se lleven a cabo en el salón de plenos.
La Comisión Permanente del Congreso sesionó de mayo a agosto pasados, mediante enlace de legisladores vía web, y para convocar a dos periodos extraordinarios los integrantes de este órgano legislativo coincideron en sesión presencial para votar el dictamen de llamado a los 19 diputados y 18 senadores que aprobaron ir a los plenos.
En el periodo ordinario de septiembre a diciembre, bajo la presidencia del senador Eduardo Ramírez Aguilar, el pleno concurrió en varias sesiones a distancia, y en las últimas fechas, para el desahogo de asuntos acumulados.