Organizaciones civiles pidieron a la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente (ASEA) no otorgar el permiso ambiental a Petróleos Mexicanos (Pemex) para la construcción de la refinería de Dos Bocas .
El Centro Mexicano de Derecho Ambiental (CEMDA), Greenpeace México, el Centro para la Diversidad Biológica (CDB) y Naturalia argumentaron que la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) del proyecto carece de información técnica fundamental y suficiente para poder ser evaluada de forma integral .
Advirtieron que este documento no aporta información completa, exhaustiva y adecuada, que tome en cuenta los principios de prevención y precaución con el fin de garantizar el derecho a un medio ambiente sano.
“Tampoco indica la manera en que se garantizará la continuidad de los servicios ambientales de los que se benefician las personas que habitan en el municipio de Paraíso, en específico, y en el estado de Tabasco, en general”, acusaron.
Las organizaciones indicaron que el proyecto pretende evaluarse de forma fragmentada, lo cual impide a las autoridades ambientales contar con información completa sobre el proyecto y, en consecuencia, conocer los impactos acumulativos y sinérgicos.
“ Pemex no está dando a conocer cuáles son las obras asociadas al proyecto principal, mismas que podrían ocasionar impactos ambientales como la fragmentación de los hábitats, modificación de los escurrimientos naturales, compactación de suelo, pérdida de filtración, así como afectación al humedal y la vegetación de manglar presente en el área, entre otros”, explicó.
Las organizaciones refirieron que la MIA no presenta un programa de reforestación detallado, puesto que para la construcción de esta obra se requiere el cambio de uso de suelo en terrenos forestales en una superficie de 71.99 hectáreas. “Sin embargo, se omitió la información respecto a las actividades de preparación del sitio, desmonte y despalme, tipo de vegetación, especies, cantidad de individuos, estatus de protección (NORMA-059-SEMARNAT-2010), así como los polígonos de las superficies donde se pretende realizar el cambio de uso de suelo” apuntaron.
Además, señalaron que aunque el Estudio Técnico Justificativo (ETJ) refiere la remoción de 71.99 hectáreas de vegetación forestal, Pemex Transformación Industrial omitió manifestar la superficie total de vegetación forestal que ya ha sido removida -la cual rebasa las 212 hectáreas.
“Esta omisión es medular, ya que la remoción de la cobertura forestal, además de haber sido objeto de diversas denuncias y procedimientos administrativos, fue llevada a cabo en terrenos propiedad de Pemex, situación que pone a la Empresa Productiva del Estado como responsable solidaria en tal acto ilegal”, subrayaron.