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En el seno de la Comisión Nacional Permanente del PAN, algunos de sus integrantes reprocharon a la presidencia, que encabeza Marko Cortés, los resultados obtenidos en la elección del domingo pasado.

Los blanquiazules pidieron “no creerse” el discurso triunfalista que desde la noche del domingo pasado expusieron ante los medios y en la redes sociales, al decir que el PAN creció, cuando perdió dos gubernaturas y la mayoría en el Congreso de Quintana Roo.

Algunos panistas dijeron a EL UNIVERSAL que en la reunión se le hizo ver a la dirigencia que, de no aceptar los resultados negativos, caerían en el error de pensar que les fue bien, cuando los números demuestran lo contrario.

Sin liderazgos ni la presencia de ninguno de los gobernadores, salvo la asistencia del excandidato presidencial Ricardo Anaya, del expresidente Marcelo Torres y el exgobernador Marco Adame, los panistas miembros del órgano más importante del partido hicieron ver a Marko Cortés que “sin triunfalismos” deben aceptar los resultados, analizar y reflexionar propuestas de mejora, si es que desean ser una alternativa democrática en México en 2021. Hubo quienes comentaron que debe quedar claro que si bien el PAN es la fuerza de oposición más fuerte, se tiene que preparar, particularmente, cuando las alianzas de Morena están funcionando, no así las que Acción Nacional establece con el PRD y Movimiento Ciudadano (MC).

Agregaron que al ser las elecciones en estados gobernados por el PAN, los resultados debieron ser más altos, aunque los números sean “mejor de lo que pensábamos”, pues en Tamaulipas, Durango y Aguascalientes había trabajo de los mandatarios.

Sugirieron a la dirigencia hacer una autocrítica y fundamentar por qué el PAN puede y debe ser alternativa para los ciudadanos.

En un comunicado, la dirigencia señaló que la Comisión Permanente se reunió para analizar los resultados del proceso electoral, en el que Acción Nacional obtuvo mayor número de votos que Morena, además de crecer en preferencias electorales, al ganar tres de seis estados, según la exposición de Marko Cortés.

El texto afirma que se reconoció a los candidatos que participaron en la elección en Aguascalientes, Durango, Tamaulipas, Puebla, Baja California y Quintana Roo, particularmente a Teresa Jiménez, quien se encontraba en la sesión y retuvo la capital de Aguascalientes.

Al perder las gubernaturas en Puebla y Baja California, Acción Nacional gobernará en 10 entidades del país: Aguascalientes, Durango, Tamaulipas, Yucatán, Querétaro, Guanajuato, Baja California Sur, Chihuahua, Quintana Roo y Nayarit.

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